FUENTE: LOS TIEMPOS
“Los acercamientos con el Gobierno de Alemania van mostrando el interés de la inversión y consolidación de la empresa que se haga cargo de la ejecución y administración de este proyecto.
Al ser un proyecto tan grande y de una inversión que supera los 10 mil millones de dólares, necesitamos tener un articulador entre los tres países que sea una empresa que, además de administrar el proyecto, rinda cuentas y nos dé una articulación total”, señaló. Claros dijo que considerando que el tren bioceánico requiere de una gran inversión, podrá ser un organismo multilateral como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Banco Mundial (BM) o la Corporación Andina de Fomento (CAF) que proporcione los recursos. Un proyecto firmado entre Brasil, Perú y China, que lo financiaría, estableció un trazo que eludía a Bolivia, lo que motivó acciones del Gobierno.
“Este megaproyecto tiene una implicancia de integración; son más de cinco países que estaremos inmersos en este proyecto, que además tiene un respaldo total de Unasur, que ha contratado a un experto en ferrocarriles y están buscando otras alternativas de financiamiento, hay muchos interesados y nuestra comisión ha ido a explicar este estudio de factibilidad a Ecuador”, señaló. Según Claros, el proyecto ferroviario avanza a paso firme luego que el presidente Evo Morales hiciera gestiones personales en Europa y binacionales en busca de apoyo al proyecto.
Dijo que el proyecto despertó expectativa en Perú, donde en mayo se licitó el estudio de factibilidad del trazo dentro de Perú, tomando en cuenta el estudio de factibilidad que Bolivia presentó. Con Brasil se avanzó en temas técnicos y se busca una reunión para absolver preguntas sobre el estudio de factibilidad.
“Los acercamientos con el Gobierno de Alemania van mostrando el interés de la inversión y consolidación de la empresa que se haga cargo de la ejecución y administración de este proyecto.
Al ser un proyecto tan grande y de una inversión que supera los 10 mil millones de dólares, necesitamos tener un articulador entre los tres países que sea una empresa que, además de administrar el proyecto, rinda cuentas y nos dé una articulación total”, señaló. Claros dijo que considerando que el tren bioceánico requiere de una gran inversión, podrá ser un organismo multilateral como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Banco Mundial (BM) o la Corporación Andina de Fomento (CAF) que proporcione los recursos. Un proyecto firmado entre Brasil, Perú y China, que lo financiaría, estableció un trazo que eludía a Bolivia, lo que motivó acciones del Gobierno.
“Este megaproyecto tiene una implicancia de integración; son más de cinco países que estaremos inmersos en este proyecto, que además tiene un respaldo total de Unasur, que ha contratado a un experto en ferrocarriles y están buscando otras alternativas de financiamiento, hay muchos interesados y nuestra comisión ha ido a explicar este estudio de factibilidad a Ecuador”, señaló. Según Claros, el proyecto ferroviario avanza a paso firme luego que el presidente Evo Morales hiciera gestiones personales en Europa y binacionales en busca de apoyo al proyecto.
Dijo que el proyecto despertó expectativa en Perú, donde en mayo se licitó el estudio de factibilidad del trazo dentro de Perú, tomando en cuenta el estudio de factibilidad que Bolivia presentó. Con Brasil se avanzó en temas técnicos y se busca una reunión para absolver preguntas sobre el estudio de factibilidad.