El presidente de la CAO, Julio Roda, le dijo al vicepresidente que se debe ser más ágil en el tema del auxilio con forraje y agua, además de la necesidad de un fondo de reactivación económica. Anapo hace gestiones por temas similares ante el ministro Cocarico.
FUENTE: EL MUNDO

El sector agropecuario presiona por dos vías al Gobierno para agilizar la ayuda prometida semanas atrás, a consecuencia de la sequía. Por un lado el pedido de agilidad es al ministro de Desarrollo Rural, Césa Cocarico; por otro al vicepresidente Álvaro García. A decir del presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Julio Roda, las promesas de ayuda todavía siguen muy lentas, mientras las pérdidas siguen en ascenso.

Solo en pérdidas el monto ya pisa los $us 500 millones, mientras que otro monto similar es por las deudas que los agricultores tienen con los proveedores de insumos agropecuarios. Sobre el tema de la deuda con casas comerciales, el presidente de la Asociación de Proveedores de Insumos Agropecuarios (APIA), Juan Mario Rojo, dijo que el fondo de reactivación económica tiene que ser de gran alcance. La idea es que con el dinero del fondo creado por el Gobierno los agricultores no solo puedan cubrir sus deudas con los proveedores, sino también que tengan cómo encarar la próxima campaña. Sigue pendiente una segunda reunión con el ministro Cocarico para darle en detalle y con sólidos respaldos las cifras de las deudas que tienen los agricultores. En función a esos datos, el Gobierno y los proveedores diseñarán un mecanismo de auxilio al agro, eso si, el Gobierno se ha mostrado reacio a la idea de comprar la deuda de los agricultores.

“Estamos buscando la fórmula, sabemos que es complicado, pero no es imposible hacer un pequeño refinanciamiento al pequeño productor porque es difícil saber cuántos productores hay afectados y en qué montos”, afirmó Julio Roda. El dirigente dijo que al vicepresidente le transmitió todas las preocupaciones y le propuso abrir mesas técnicas para abordarlas una a una. Por ejemplo otra problemática que preocupa es la falta de mercado para la leche. Hay una sobreoferta.