La Organización Panamericana de la Salud (OPS) resaltó ayer en Bolivia que la aplicación de mayores impuestos al tabaco es la estrategia más eficaz para reducir su demanda, si bien lamentó que es la medida que menos ha progresado desde la puesta en marcha del convenio para el control del tabaco.
FUENTE: JORNADA

La asesora internacional de la oficina regional de la OPS en Bolivia, Rosalinda Hernández, explicó que los precios elevados del tabaco inducen a abandonar su consumo y además evitan que se empiece a fumar, según un comunicado de la oficina del organismo en La Paz. No obstante, llamó la atención sobre el hecho de que sea la medida del Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT) que menos ha progresado desde su aprobación hace diez años.

Hernández mencionó que Chile es el único país de la región donde los impuestos a los cigarrillos representan más del 75 % de su precio de venta al por menor. "Otros países han avanzado en incrementos de los impuestos, aún sin llegar a este nivel, como ha sucedido recientemente en Argentina, Jamaica y Perú", agregó. Según Hernández, además del aumento de impuestos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) también identificó como medidas eficaces para reducir el consumo del tabaco la habilitación de "espacios libres de humo", las advertencias sanitarias gráficas, la prohibición de la publicidad y la promoción y patrocinio del tabaco.

La asesora remarcó que 30 de los 35 estados del continente miembros de la OPS/OMS han ratificado el CMCT, pero su implementación muestra avances desiguales, ya que según el informe sobre Control de Tabaco 2016, solo seis países han aplicado cuatro de las seis medidas de reducción de la demanda conocidas. Las consideraciones de Hernández se dan dentro de la visita a Bolivia de una misión internacional de alto de nivel de la OMS, encabezada por Carmen Audera-López, cuyo propósito es evaluar las necesidades del país para aplicar adecuadamente el CMCT y sus directrices. Bolivia firmó el citado convenio en 2004 y lo ratificó mediante una ley promulgada en 2005, según datos de la OPS/OMS. Asimismo, el país andino cuenta con un decreto de 2007 que reglamenta todos los productos de tabaco y protege a la exposición del humo de tabaco ajeno.

En Bolivia el tabaco es la segunda droga más consumida después del alcohol, con una prevalencia año de 25 % en población de 12 a 65 años, según un reporte de 2014 del Consejo Nacional de Lucha Contra el Tráfico Ilícito de Drogas citado por la OPS/OMS. El mismo estudio mostró un incremento en la tendencia de fumadoras y que la edad de inicio del tabaquismo ronda los 17 años.