FUENTE: LA PRENSA
“En la Alianza no competimos entre nosotros, pensamos como bloque”, destacó la titular de Comercio Exterior y Turismo de Perú, quien esta semana participó en la XI de la Alianza del Pacífico, celebrada en Puerto Varas, Chile. Con 220 millones de consumidores, el 44 por ciento de la inversión extranjera directa de América Latina, la mitad del comercio exterior y el 38 por ciento del PIB regional, el bloque integrado por México, Colombia, Perú y Chile se ha revelado como una de las experiencias de integración más exitosas del mundo.
Pero aún hay muchos desafíos por superar, entre ellos, el comercio interregional, que apenas alcanza el 4 por ciento y que a juicio de la ministra Silva es “el gran reto” de la Alianza. Para aprovechar este potencial, “estamos identificando las áreas en las que podemos integrar cadenas globales de valor”, explicó Silva, quien puso como ejemplo la industria automotriz mexicana, la de mayor desarrollo relativo de los cuatro países. “México exporta automóviles a Estados Unidos y Canadá, y nosotros, Perú, somos productores mineros y tenemos una mano de obra extraordinaria en el sector de metal mecánica”. Silva defiende que el tejido productivo de la Alianza del Pacífico está preparado para afrontar el reto de competitividad que supone este cambio de reglas.
“En la Alianza no competimos entre nosotros, pensamos como bloque”, destacó la titular de Comercio Exterior y Turismo de Perú, quien esta semana participó en la XI de la Alianza del Pacífico, celebrada en Puerto Varas, Chile. Con 220 millones de consumidores, el 44 por ciento de la inversión extranjera directa de América Latina, la mitad del comercio exterior y el 38 por ciento del PIB regional, el bloque integrado por México, Colombia, Perú y Chile se ha revelado como una de las experiencias de integración más exitosas del mundo.
Pero aún hay muchos desafíos por superar, entre ellos, el comercio interregional, que apenas alcanza el 4 por ciento y que a juicio de la ministra Silva es “el gran reto” de la Alianza. Para aprovechar este potencial, “estamos identificando las áreas en las que podemos integrar cadenas globales de valor”, explicó Silva, quien puso como ejemplo la industria automotriz mexicana, la de mayor desarrollo relativo de los cuatro países. “México exporta automóviles a Estados Unidos y Canadá, y nosotros, Perú, somos productores mineros y tenemos una mano de obra extraordinaria en el sector de metal mecánica”. Silva defiende que el tejido productivo de la Alianza del Pacífico está preparado para afrontar el reto de competitividad que supone este cambio de reglas.