La COB inicia hoy un paro de 72 horas en contra del cierre de Enatex y alista alfombras humanas, bloqueo de las mil esquinas en las ciudades capitales y bloqueo de carreteras troncales, anunció ayer su ejecutivo, Guido Mitma.
LOS TIEMPOS y AGENCIAS
  
En Cochabamba, tanto colegios privados como públicos tienen clases y sólo habrá tolerancia en el ingreso.
 
El ejecutivo de la Central Obrera Departamental (COD) de Cochabamba, Ángel Camacho, declaró a este medio que el paro anunciado por la Central Obrera Boliviana (COB) será acatado con bloqueos en el centro de la ciudad y en las carreteras que conectan al departamento con el interior del país.
 
Añadió que se masificarán los puntos de bloqueo en puentes, en la carretera hacia Santa Cruz y hacia el occidente.
 
El director de Tránsito de Cochabamba, Raúl Butrón, señaló que hasta anoche las salidas de buses de la terminal eran normales. Sin embargo, dijo que hoy la situación puede cambiar previa evaluación.
 
En tanto, el presidente de la Asociación de Colegios Particulares (Andecop), Genaro Durán, informó que en coordinación con la Dirección Departamental de Educación (DDE), las clases se desarrollarán con normalidad. Sólo habrá tolerancia en los horarios de ingreso.
 
Por su parte, el ejecutivo del Transporte Federado del departamento, José Orellana, sostuvo que su sector apoya el pedido de la COB, pero no paralizará sus actividades.      
 
Guido Mitma denunció ayer que el contenido del decreto 2765 amenaza a la estabilidad laboral en 15 empresas de distintos sectores entre públicos y privados, lo cual muestra la magnitud del riesgo de mantener vigente a esa disposición emitida por el presidente Evo Morales, reportó Erbol.
 
Informó que durante el ampliado del lunes, mineros, ferroviarios, empresas de Santa Cruz y otras, entre ellas Industrias Venado S.A., denunciaron inseguridad laboral. Dijo que una lista ya fue elevada a conocimiento del Gobierno.
 
Durante la clausura del “I Encuentro internacional de experiencia de atención primaria de salud”, realizado en esta ciudad, el vicepresidente del Estado, Álvaro García, afirmó que aunque el diálogo “no está cerrado”, la posición del Gobierno fue clara respecto al cierre de Enatex.
 
“El decreto por decisión de los propios trabajadores (que recogieron su finiquito) ya se ha cumplido (…), pero hay algunos dirigentes que prefieren irse a la movilización, ustedes han visto la anterior semana, paro en verdad no hubo, lo que hubo eran marchas”, dijo en declaraciones recogidas por radio Fides.
 
García amenazó con descuentos a los trabajadores que no asistan a trabajar. “Si un maestro no va a trabajar el martes o el jueves, se viene el descuento, eso no se negocia”, afirmó.
 
Para García, la posible ruptura de la alianza política entre la COB y el Gobierno es un problema de los dirigentes y no de los trabajadores de base. “El trabajador de base mantiene su apego al proceso de cambio”, añadió. 
 
En tanto, Morales aseguró ayer que el paro de la COB es “ilegal” porque no existe una demanda nacional y estructural de por medio.
 
“Es su derecho, pero es un paro ilegal, no justifica, qué demanda (hay) de carácter nacional, estructural, además no hay paro”, indicó en entrevista con radio Atipiri, de la ciudad de El Alto, citado por ABI.
 
Sobre el paro, el ministro de Economía, Luis Arce, advirtió ayer que si la COB tiene éxito con su medida y además continua con similares medidas de presión, el pago del segundo aguinaldo para esta gestión está en riesgo. 
 
 
 
NO TEMEN RUPTURA
 
En un evento realizado en esta ciudad, el vicepresidente Álvaro García Linera, afirmó ayer que no existe temor en el Gobierno ante un posible alejamiento de la COB.
 
“Hay dirigentes que están pensando algo así, pero las bases no lo van a hacer, las bases están con el proceso de cambio y lo que definan las bases eso es lo que un dirigente tiene que cumplir”, afirmó.
 
Las declaraciones fueron vertidas después de que el ejecutivo de la COB, Guido Mitma, diera por rota la alianza política con el Gobierno tras el ampliado del lunes en La Paz. Mitma dijo que fue el Gobierno el que rompió la alianza con los trabajadores al minimizar sus anteriores movilizaciones.