EL PAIS - TARIJA
Ya que se vieron seriamente afectados al paralizarse los desembolsos. Los empresarios ahora apuntan a diversificar sus inversiones para reducir esta exclusividad, con emprendimientos en otros rubros que les permitan acceder a más fuentes de ingresos.
Dejar de ser dependientes de los recursos estatales, es el reto que se traza el sector privado, según confirma el presidente de la Federación de Empresarios Privados de Tarija (FEPT), Álvaro Baldivieso, a tiempo de indicar que se planteará a la Gobernación un consenso departamental de manera urgente, para definir una estrategia que permita coordinar hacia dónde se dirigen las inversiones, que plantean sean enfocadas en la generación de condiciones, que darán lugar a la independencia futura del sector. Entre las condiciones para el desarrollo del sector, está la implementación de parques industriales, fortalecimiento e industrialización agrícola, un plan departamental de turismo, proyectos para darle valor agregado a la producción del campo, industrialización de alimentos, etc. “No va ser tan rápido pero a eso apuntamos, a no depender de lo que ejecute o no ejecute la Gobernación. Santa Cruz es un ejemplo, tiene una economía dinámica propia, nosotros tenemos que ser empresas que no solamente trabajen para venderle al Estado, sino cubrir el consumo departamental, nacional, o exportar. Esto va a permitir no solo que el sector empresarial disminuya la dependencia, sino toda la economía en sí”, expresó Baldivieso. En ese marco, el presidente de la FEPT explicó que ya se ha firmado un convenio con las subgobernaciones de la provincia Gran Chaco, que dará lugar a la creación de industrias en torno a las condiciones ya existentes, que indicó provienen del Gobierno. Un claro ejemplo –dijo- es la inversión millonaria que se realiza en la construcción de la Planta de Propileno y Polipropileno, que será una madre de otras industrias.
Para José Porcel, economista y docente tarijeño, es el Estado el que debe dar las condiciones en los inicios, para que el sector se independice y genere un movimiento económico que implica mayor aporte al desarrollo. Para ello, aclaró que es menester además erradicar el contrabando, fomentar la producción regional, crear las condiciones de infraestructura, servicios, caminos, comunicación, que permitan a las empresas desarrollarse e invertir más. “Cuando nosotros dejemos de mirar a la Gobernación como la única fuente generadora de ingresos vamos a dejar de depender, por eso se tiene que invertir las regalías en los potenciales productivos de la región. Por otra parte, se debe hacer énfasis en la educación, para crear una mentalidad de independencia económica. Tarija ya ha vivido muchos años del gas”, explicó. En este punto, el economista tomó como referencia la economía de Santa Cruz, donde a partir de 1952, por una decisión del Gobierno Nacional, se determinó que la mayor parte de las regalías que provenían en ese tiempo de los minerales, sean invertidas en infraestructura, en condiciones que hacen que el proceso de industrialización sea más adelantado en aquella región. “Se requiere del mismo plan, es hora de que se devuelva algo del aporte que Tarija realizó al desarrollo nacional en inversiones estratégicas”, agregó Porcel.
El presidente de la Cámara de la Construcción (Cadeco), Julio Alemán, confirmó que ya se están asumiendo medidas para reducir esta dependencia, como la migración de empresas al interior del país, disposición de inversiones en emprendimientos en distintos rubros. Empero, el empresario indicó que al momento es necesario implementar en el departamento las condiciones para diversificar la economía, con la creación de parques industriales, y el fortalecimiento de las cadenas productivas ya identificadas. Alemán dijo que desde 2015, el sector soporta los efectos de la caída del petróleo, lo que ha dado lugar a un análisis interno del sector. “Efectivamente hay una dependencia. Sin embargo, nosotros hemos apoyado con recursos privados al departamento, con más de 400 millones de bolivianos, es lo que ha cargado el sector en las espaldas. Hay una dependencia pero también una participación que debe ser correspondida con inversiones que generen las condiciones para poder invertir”, agregó.
Líos políticos, una dificultad para el desarrollo
José Luis Porcel explicó que la cuestión política en Tarija es una limitante para el desarrollo, ya que es necesario que la Gobernación y Asamblea Legislativa Departamental (ALDT), puedan despojarse de los prejuicios e intereses que han generado desde hace tiempo atrás, un efecto nocivo que se ve plasmado en la realidad económica actual. Otro problema que tienen las empresas, es que el Estado aplica impuestos, cuando se importa maquinaria por ejemplo, incluso antes de que la inversión en determinado rubro produzca utilidades. A esto se suma el pago de licencias de funcionamiento y las cargas laborales. Porcel explicó que es necesario un fomento a la producción, que estimule el asentamiento de una inversión, con medidas como las facilidades tributarias por ejemplo.
Ya que se vieron seriamente afectados al paralizarse los desembolsos. Los empresarios ahora apuntan a diversificar sus inversiones para reducir esta exclusividad, con emprendimientos en otros rubros que les permitan acceder a más fuentes de ingresos.
Dejar de ser dependientes de los recursos estatales, es el reto que se traza el sector privado, según confirma el presidente de la Federación de Empresarios Privados de Tarija (FEPT), Álvaro Baldivieso, a tiempo de indicar que se planteará a la Gobernación un consenso departamental de manera urgente, para definir una estrategia que permita coordinar hacia dónde se dirigen las inversiones, que plantean sean enfocadas en la generación de condiciones, que darán lugar a la independencia futura del sector. Entre las condiciones para el desarrollo del sector, está la implementación de parques industriales, fortalecimiento e industrialización agrícola, un plan departamental de turismo, proyectos para darle valor agregado a la producción del campo, industrialización de alimentos, etc. “No va ser tan rápido pero a eso apuntamos, a no depender de lo que ejecute o no ejecute la Gobernación. Santa Cruz es un ejemplo, tiene una economía dinámica propia, nosotros tenemos que ser empresas que no solamente trabajen para venderle al Estado, sino cubrir el consumo departamental, nacional, o exportar. Esto va a permitir no solo que el sector empresarial disminuya la dependencia, sino toda la economía en sí”, expresó Baldivieso. En ese marco, el presidente de la FEPT explicó que ya se ha firmado un convenio con las subgobernaciones de la provincia Gran Chaco, que dará lugar a la creación de industrias en torno a las condiciones ya existentes, que indicó provienen del Gobierno. Un claro ejemplo –dijo- es la inversión millonaria que se realiza en la construcción de la Planta de Propileno y Polipropileno, que será una madre de otras industrias.
Para José Porcel, economista y docente tarijeño, es el Estado el que debe dar las condiciones en los inicios, para que el sector se independice y genere un movimiento económico que implica mayor aporte al desarrollo. Para ello, aclaró que es menester además erradicar el contrabando, fomentar la producción regional, crear las condiciones de infraestructura, servicios, caminos, comunicación, que permitan a las empresas desarrollarse e invertir más. “Cuando nosotros dejemos de mirar a la Gobernación como la única fuente generadora de ingresos vamos a dejar de depender, por eso se tiene que invertir las regalías en los potenciales productivos de la región. Por otra parte, se debe hacer énfasis en la educación, para crear una mentalidad de independencia económica. Tarija ya ha vivido muchos años del gas”, explicó. En este punto, el economista tomó como referencia la economía de Santa Cruz, donde a partir de 1952, por una decisión del Gobierno Nacional, se determinó que la mayor parte de las regalías que provenían en ese tiempo de los minerales, sean invertidas en infraestructura, en condiciones que hacen que el proceso de industrialización sea más adelantado en aquella región. “Se requiere del mismo plan, es hora de que se devuelva algo del aporte que Tarija realizó al desarrollo nacional en inversiones estratégicas”, agregó Porcel.
El presidente de la Cámara de la Construcción (Cadeco), Julio Alemán, confirmó que ya se están asumiendo medidas para reducir esta dependencia, como la migración de empresas al interior del país, disposición de inversiones en emprendimientos en distintos rubros. Empero, el empresario indicó que al momento es necesario implementar en el departamento las condiciones para diversificar la economía, con la creación de parques industriales, y el fortalecimiento de las cadenas productivas ya identificadas. Alemán dijo que desde 2015, el sector soporta los efectos de la caída del petróleo, lo que ha dado lugar a un análisis interno del sector. “Efectivamente hay una dependencia. Sin embargo, nosotros hemos apoyado con recursos privados al departamento, con más de 400 millones de bolivianos, es lo que ha cargado el sector en las espaldas. Hay una dependencia pero también una participación que debe ser correspondida con inversiones que generen las condiciones para poder invertir”, agregó.
Líos políticos, una dificultad para el desarrollo
José Luis Porcel explicó que la cuestión política en Tarija es una limitante para el desarrollo, ya que es necesario que la Gobernación y Asamblea Legislativa Departamental (ALDT), puedan despojarse de los prejuicios e intereses que han generado desde hace tiempo atrás, un efecto nocivo que se ve plasmado en la realidad económica actual. Otro problema que tienen las empresas, es que el Estado aplica impuestos, cuando se importa maquinaria por ejemplo, incluso antes de que la inversión en determinado rubro produzca utilidades. A esto se suma el pago de licencias de funcionamiento y las cargas laborales. Porcel explicó que es necesario un fomento a la producción, que estimule el asentamiento de una inversión, con medidas como las facilidades tributarias por ejemplo.