El representante de la CAF en Bolivia, Emilio Uquillas, demandó mayor inversión en el talento humano • Onudi prepara programa orientado a la eficiencia energética en la industria.
EL DIARIO
El experto de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (Onudi), Johannes Dobinger, señaló que Bolivia se encuentra en el último lugar en el índice de desempeño industrial en la región andina, por debajo de sus socios comerciales. El especialista que participó en el Foro Productividad Industrial, la semana pasada, indicó que a nivel global todos los países registran bajos niveles en su desempeño y están, en esta materia, muy lejos –por ejemplo– de Alemania y Japón, que lideran este tema en el mundo.
PROGRAMA
Dobinger anunció que Onudi elabora un programa de apoyo a Bolivia en relación a las políticas públicas para producir con calidad. Este programa permitirá asistir a las empresas para que logren mayor eficiencia energética. “Estamos en negociaciones con el Gobierno y es importante para impulsar políticas industriales con la participación del Gobierno y el sector privado”, sostuvo.
INVERSIÓN
Manifestó que las naciones desarrolladas invierten recursos en investigación y desarrollo equivalente a 4 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB). “Lo preocupante es que la brecha se abre cada vez más”, sostuvo.
ESTANCAMIENTO
Dobinger calificó esa situación como un peligroso estancamiento que afecta a la subregión andina y en especial a Bolivia. El especialista de Onudi atribuyó este escenario a la orientación de las inversiones en la subregión que se dirigen preferentemente al sector extractivo. Abogó porque las naciones del continente desarrollen mayor coherencia a la hora de formular sus políticas, principalmente, en los sectores agroindustrial y minería.
CAF
El representante de la CAF en Bolivia, Emilio Uquillas, dijo que la entidad ha formulado en los años anteriores su tesis sobre la transformación productiva y al presente es el desafío de varios países. "Lo que se busca es mejorar las condiciones productivas de las naciones de la región aquejados por las bajas tasas de empleabilidad e innovación tecnológica", sostuvo. Además hizo hincapié en la necesidad de mejorar la asignación de recursos. “En mi criterio hay una fórmula para enfrentar este reto y es desarrollar el talento, talento, talento”, sostuvo.
MANUFACTURAS
De acuerdo a información del analista Bruno Rojas del Centro de Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla), la mayoría de las industrias en Bolivia corresponde al sector de las manufacturas. Este sector se encuentra rezagado tecnológicamente. El presidente de la Cámara Departamental de Industrias, Horacio Villegas, reconoció la semana pasada que existen varias décadas de atraso en el sector, aunque reconoció que hay algunos rubros que han incursionado en la innovación y desarrollo.
Rojas señaló, que gran parte de las industrias están en una etapa de manufactura, donde predomina el trabajo manual, pero, agregó que hay relativas inversiones en tecnología en algunos rubros.
“Algunos de aquellos han incorporado tecnologías de punta, así como innovaron en la elaboración de productos. Las industrias farmacéuticas se han desarrollado más que los otros rubros del sector industrial”, según manifestó.
CAPITAL HUMANO
La modernización de la industria nacional permitirá mejorar su competitividad en el mercado nacional e internacional, y para ello necesita invertir en tecnología, y paralelamente en recursos humanos. Rojas afirmó, asimismo, que las universidades tienen que identificar la demanda del sector empresarial, así como los privados deben abrir sus requerimientos a la investigación universitaria.
NIVEL TECNOLÓGICO
Una publicación del diario El Deber de Santa Cruz, del 9 de septiembre de 2015, señala que las empresas, en general, deben elevar su nivel de productividad para enfrentar el incremento en los costos laborales. Esto se relaciona, con el uso de tecnologías, pues solo el 1,7% de las industrias bolivianas tiene alta tecnología, según el Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural.
Según esa misma publicación, el 31% de las factorías cuenta con mediana tecnología y un 67% con baja tecnología.