Fuente: LA RAZÓN
La Cámara de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz) hizo notar ayer sobre el incremento de las adjudicaciones de obras públicas por contratación directa o excepción. “Los últimos años la excepción se va convirtiendo en la regla”, asegura.
Cadecocruz indica que según la normativa vigente (Decreto Supremo 0181-Normas Básicas del Sistema de Administración de Bienes y Servicios), esta modalidad fue creada para casos especiales, excepcionales, de emergencia o desastre, y previa justificación de la entidad contratante. “Investigaciones periodísticas señalan que en 2004, Bs 600.000 fueron asignados vía contratación directa y que el año 2014 este monto llegó hasta Bs 19.603 millones”, manifiesta la entidad que aglutina a las empresas constructoras de Santa Cruz.
Simultáneamente, añade, aumentaron las adjudicaciones a las compañías extranjeras. Según el Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes), las últimas gestiones unas 30 empresas internacionales obtuvieron contratos para ejecutar al menos 51 obras con un valor global superior a los Bs 39.247 millones.
LICITACIÓN. “Con el argumento de que los procesos de licitación son largos, se invita directamente a empresas que no necesariamente pueden ser las mejores o las más idóneas, son simplemente las elegidas”, afirma Cadecocruz en una nota de prensa.
Expresa que las adjudicaciones por invitación directa se prestan a la subjetividad de los dependientes de la administración pública en la asignación de las empresas invitadas o en la contratación. Y señala que si bien algunos malos funcionarios pueden cometer irregularidades durante cualquier proceso de contratación, “la licitación pública es la modalidad que ofrece mayor transparencia e igualdad de oportunidades” para todos. “A los bolivianos nos interesa que se adjudiquen y arranquen obras de infraestructura, pero consideramos que lo realmente importante es que finalicen, se entreguen y funcionen de acuerdo con las exigencias de calidad, plazos y garantías”, sostiene.
EXCEDENTES. Por otro lado, señala, la mayoría de las obras de magnitud se adjudican a empresas extranjeras que solo traen al país garantías y gerentes “llevándose los excedentes a sus países de origen, aunque casi la totalidad de los profesionales, obreros y maquinarias son bolivianos”.
“Los constructores queremos trabajar como socios, no solo como empleados de las compañías extranjeras. Hacia este objetivo, en 2014 se presentó al Gobierno un proyecto de ley que garantiza una participación de al menos 30% a las empresas bolivianas y en condición de socias”. El 23 de enero, el presidente de la Cámara Boliviana de la Construcción (Caboco), Christian Eduardo, indicó que en coordinación con el Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda se establecieron varias mesas de trabajo para que el empresariado privado nacional tenga una mayor participación en los megaproyectos de infraestructura del sector público, sobre todo de infraestructura.
La Cámara de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz) hizo notar ayer sobre el incremento de las adjudicaciones de obras públicas por contratación directa o excepción. “Los últimos años la excepción se va convirtiendo en la regla”, asegura.
Cadecocruz indica que según la normativa vigente (Decreto Supremo 0181-Normas Básicas del Sistema de Administración de Bienes y Servicios), esta modalidad fue creada para casos especiales, excepcionales, de emergencia o desastre, y previa justificación de la entidad contratante. “Investigaciones periodísticas señalan que en 2004, Bs 600.000 fueron asignados vía contratación directa y que el año 2014 este monto llegó hasta Bs 19.603 millones”, manifiesta la entidad que aglutina a las empresas constructoras de Santa Cruz.
Simultáneamente, añade, aumentaron las adjudicaciones a las compañías extranjeras. Según el Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes), las últimas gestiones unas 30 empresas internacionales obtuvieron contratos para ejecutar al menos 51 obras con un valor global superior a los Bs 39.247 millones.
LICITACIÓN. “Con el argumento de que los procesos de licitación son largos, se invita directamente a empresas que no necesariamente pueden ser las mejores o las más idóneas, son simplemente las elegidas”, afirma Cadecocruz en una nota de prensa.
Expresa que las adjudicaciones por invitación directa se prestan a la subjetividad de los dependientes de la administración pública en la asignación de las empresas invitadas o en la contratación. Y señala que si bien algunos malos funcionarios pueden cometer irregularidades durante cualquier proceso de contratación, “la licitación pública es la modalidad que ofrece mayor transparencia e igualdad de oportunidades” para todos. “A los bolivianos nos interesa que se adjudiquen y arranquen obras de infraestructura, pero consideramos que lo realmente importante es que finalicen, se entreguen y funcionen de acuerdo con las exigencias de calidad, plazos y garantías”, sostiene.
EXCEDENTES. Por otro lado, señala, la mayoría de las obras de magnitud se adjudican a empresas extranjeras que solo traen al país garantías y gerentes “llevándose los excedentes a sus países de origen, aunque casi la totalidad de los profesionales, obreros y maquinarias son bolivianos”.
“Los constructores queremos trabajar como socios, no solo como empleados de las compañías extranjeras. Hacia este objetivo, en 2014 se presentó al Gobierno un proyecto de ley que garantiza una participación de al menos 30% a las empresas bolivianas y en condición de socias”. El 23 de enero, el presidente de la Cámara Boliviana de la Construcción (Caboco), Christian Eduardo, indicó que en coordinación con el Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda se establecieron varias mesas de trabajo para que el empresariado privado nacional tenga una mayor participación en los megaproyectos de infraestructura del sector público, sobre todo de infraestructura.