El mandatario ecuatoriano, Rafael Correa, confirmó este miércoles que se realizará un reajuste al Presupuesto General del Estado (PGE) con un precio por barril de petróleo de 25 dólares y no de 35, como se aprobó en 2015, con el fin de proteger la economía ecuatoriana frente a la situación económica externa.
Fuente: Andes

“El día lunes he tenido otra reunión muy larga sobre presupuesto para ajustar el precio referencial del barril, estaba a 35 y lo hemos ajustado a 25 (dólares)”, señaló el mandatario en declaraciones a periodistas en Quito. El Jefe de Estado también aclaró que se va a priorizar la inversión en el sector social “sin afectar a los más pobres”. Y agregó que, al igual que en 2015, cuando también se ajustó el PGE, se trabajará en beneficio de la clase baja del país. “Ellos (la oposición) dicen no ha hecho nada Correa y proporcionalmente hemos hecho más que México y Brasil (…) y lo hicimos sin afectar a los más pobres ellos están esperando el garrotazo a la clase baja, que sigan esperando”, finalizó.

El pasado lunes el mandatario se reunió con su gabinete ministerial en el Palacio de Carondelet, en el centro histórico de Quito, para analizar las cifras macroeconómicas y las proyecciones de crecimiento de Ecuador en este año. En ese encuentro, según informó el ministro coordinador de la Política Económica, Patricio Rivera, se definió que “las cifras macroeconómicas, el entorno internacional y los precios del crudo determinan que debemos hacer ajustes (en el PGE)”. En noviembre del año pasado la Asamblea Nacional aprobó un presupuesto de 29.835 millones de dólares para 2016, con un precio de 35 dólares por barril de petróleo, el más bajo de la región.

Para el ajuste presupuestario, dijo el ministro, se tomarán en cuanta dos factores externos: el precio del barril del crudo que en la realidad oscila entre los “25 dólares” y los 900 millones de dólares que Ecuador debe cancelar a la multinacional OXY, tras un juicio que esta ganó en contra del país sudamericano.