Las rebajas de la gasolina y el encarecimiento de los pasajes aéreos son los extremos que han experimentado los consumidores colombianos por meses de caída del petróleo y encarecimiento del dólar.
Fuente: La Republica
  
Mientras en los mercados internacionales, como Londres o Nueva York, sigue la caída del petróleo que, a su vez, lleva al dólar a nuevos máximos históricos, los consumidores esperan ver cómo eso los favorece o los golpea. Algunos bienes o servicios en principio se favorecen por el petróleo más barato, pero al volver a pasar esos costos de dólares a pesos, el efecto se pierde. En general, ese pulso entre dólar, que encarece, y petróleo, que abarata, lo va ganando el primero y, en un grupo de 9 rubros, los combustibles para vehículos son los únicos que han visto bajar sus precios en el último año. A la vuelta de poco más de un año, en la compra de productos y servicios en el exterior se ha visto que el cambio del dólar pasó de alrededor de 2.000 pesos por dólar a 3.300 pesos. Como consecuencia, se han impactado precios, por ejemplo, de paquetes turísticos, lo que lleva a reducir viajes al exterior y optar por destinos nacionales. La compra de tecnología se encareció, y no pocos programas de actualización puede reducirse o cancelarse.
 
VISITAS A DISNEY SE APLAZAN O CANCELAN
 
Paula Cortés Calle, presidenta de Anato, señaló que la divisa ya ha impactado sobre los viajes al exterior, que, según las cifras entregadas por Migración Colombia, ya caen. La cantidad de colombianos que viajaron al exterior en el 2015 disminuyó 1,3 por ciento con respecto al 2014. “Esperábamos, como sucedió, una desaceleración de los viajes hacia otros países motivados por hechos como la revaluación del dólar; actualmente estamos recopilando información de nuestras agencias de viajes asociadas, para conocer los principales destinos y planes y paquetes nacionales e internacionales que más se vendieron durante la temporada”, agregó. Cortés recuerda que la devaluación es un fenómeno que no solo está afectando a Colombia, sino, en su mayoría, a toda América Latina; por ello las tendencias en viajes para este año estarán principalmente enfocadas hacia los países que también han sufrido ese fenómeno y que, por tal razón, resultan más económicos para el viajero colombiano. “Creemos que, por su parte, los viajes receptivos y el turismo dentro del país han aumentado. En el primero de los casos, según Migración, el incremento de visitantes extranjeros el año pasado fue de 16 por ciento, sin tener en cuenta el transfronterizo. Los pasajeros aéreos nacionales, hasta noviembre, se habían incrementado 10 por ciento. Estamos esperando los resultados para un consolidado total del año”, concluyó.
 
PRECIOS DE TIQUETES, NI EN EL PAÍS DECRECEN
 
Gilberto Salcedo, director de la Asociación de Transporte Aéreo de Colombia (Atac), manifestó que la reducción de los precios del petróleo no necesariamente se puede ver traducida en alivios en las tarifas de los tiquetes aéreos. Afirmó que si se mira la estructura del total de costos que tiene una aerolínea, entre el 30 y el 35 por ciento en promedio corresponde al combustible de aviación, mientras que el 65 por ciento restante están dolarizados. “Luego hay que poner en una balanza, por un lado, si la caída de los precios de ese combustible, que en el último año se puede hablar de un promedio del 40 por ciento (ese 35 por ciento cae un 40 por ciento), y por el otro la tasa de cambio, que en ese mismo periodo tuvo una variación de cerca del 40 por ciento también (lo que afecta el 65 por ciento). Entonces, cuando esto se une en el neto, la estructura de costos de una aerolínea, en lugar de abaratarse, termina encareciéndose casi en 19 puntos porcentuales en promedio”, recalcó Salcedo. Añadió que esta situación no contempla además las particularidades de cierto tipo de aerolíneas, porque todas tienen distintas maneras de hacer sus compras. Por ejemplo, hay algunas que emplean coberturas que, para lidiar con la volatilidad de los precios del combustible, les permiten comprar a un precio determinado para el año siguiente, independientemente de si varía o no el petróleo.
 
GALÓN DE GASOLINA, DURO DE CAER
 
Tras varios meses, el bajo precio del crudo impactó el precio del galón de gasolina. El combustible es presionado a la baja por la caída del petróleo, pero también lo presiona, al alza, el dólar. A la larga, durante el año pasado, el efecto neto fue una rebaja de los precios, y en diciembre estaban 7,9 por ciento más bajos que un año antes, y se ubicó en 7.818 pesos. Para diciembre del 2015, el precio de la gasolina tiene una reducción de 87 pesos con respecto al mes anterior, para acumular el séptimo mes de caídas de ese año. En el 2015, el precio de la gasolina presentó una reducción de 927 pesos. El precio de la gasolina promedio en el 2015 fue de 8.076 (disminuyó 540 pesos frente al promedio del 2014). El precio de la gasolina para diciembre es el más bajo de los últimos cinco años. En enero se dio la contradicción de que se fijó un precio del galón con un aumento de 78 pesos, y el Ministerio de Minas tuvo que salir pocos días después a rebajarlo, dada la escasez de caña de azúcar, lo que causó escasez de etanol y obligó a bajar el porcentaje de la mezcla de carburante. Sin embargo, el ministro de Minas y Energía, Tomás González, dijo que la situación puede ser temporal mientras se normaliza la producción de biocombustibles. La fórmula en Colombia, además, está diseñada de modo que cuando los precios del petróleo suben, la oscilación no es tan brusca, y viceversa.
 
TECNOLOGÍA, DE LOS MÁS AFECTADOS
 
El dólar impacta el sector de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) debido a que la gran mayoría de los servicios, plataformas y productos que se comercializan en el país se adquieren en la divisa. Los celulares, tabletas y computadores, tres de los productos de mayor rotación, han presentado aumentos de precios cercanos al 30 por ciento en el último año. Si a eso le sumamos, en el caso de la telefonía, que en Colombia no existen subsidios, tras la eliminación de las cláusulas de permanencia, el valor de gamas altas, denominadas de móviles inteligentes, se encuentra en rangos desde los 2 millones de pesos en adelante. Otros renglones del sector, como el de servicios de conectividad y de la denominada nube (aplicaciones, almacenamiento, etc., desde internet), también han recibido un impacto por efecto del dólar. Alberto Samuel Yohai, presidente de la Cámara Colombiana de Informática y Telecomunicaciones (CCIT), dice que los efectos no solo se ven reflejados en que los presupuestos de personas y empresas para invertir en tecnología, que son en pesos, cada vez alcanzan menos, sino en fenómenos como “el contrabando técnico y directo”, que se elevan cuando los precios del mercado legal se disparan. Sin embargo, el dólar beneficia al software y servicios, y se esperan este año exportaciones por 50 millones de dólares.