El cuadro correspondiente del informe, muy escueto por cierto, revelaba que la o Sistema Interconectado Nacional (SIN) había llegado al 10,74%. El material de referencia no explica si ese seguimiento lo detuvieron el martes 23 de diciembre o el lunes 30 de noviembre último. Tampoco los números absolutos de ese comportamiento del SIN.
Consumo nacional araña los 30 millones de MWh En rigor, la diferencia entre uno y otro total es del 10,4%, dato que no podrá precisarse antes de que la ANDE o el Viceministerio de Minas y Energía divulgen sus últimos informes relativos a este perfil del Sistema Interconectado Nacional.
Apuntemos también que 28.873.579,92 MWh equivalen a la producción 37,61 centrales como Acaray, - según su generación del año pasado -, que por poco no duplica la producción de Yacyretá, claro si la misma opera con toda su capacidad y con un buen comportamiento del río Paraná.
Apuntábamos también que, a pesar de ciertos pronósticos muy optimistas, el tamaño de la tasa de crecimiento del consumo eléctrico nacional sería muy inferior a la que se alcanzó en 2024. La misma se quedó este año muy por debajo de la divulgada por la empresa eléctrica en 2024: -7,7% (18,4-10,7= 7,7).
El informe de referencia tampoco se detiene, a explicar al menos, las razones de esa reducción. En 2024, cuanto la tasa fue del 18,4% respecto a la del 2023, los responsables de turno de la ANDE, atribuyeron el caso, definitivamente extraordinario, a la irrupción en el mercado paraguayo de las criptomineras. Consumo más pérdidas = a demanda nacional Referirse a la tasa de crecimiento ignorando el comportamiento de la tasa de pérdidas de la empresa estatal sería ocultar “al ciudadano” una porción considerable de la verdad. En el informe del martes último, se lee que esta tasa bajó del 21,89% al 21% este año, pero no se explica porque la publicación excluyó la que la estatal pierde en las líneas de transmisión y solo se refiere a lo que sucede en las redes de distribución.
En los registros históricos de la estatal, en la columna correspondiente al 2024, se observa que en las líneas de transmisión perdió 4,6%, en distribución 21,89%, cifras que arrojan un total del 26,51%. En otras palabras, de cada 100 MWh que la ANDE inyectó a su sistema perdió ese año casi 27 MWh o 27.000 KWh. En números absolutos, en el ejercicio precedente la empresa eléctrica había perdido, tanto en las líneas de transmisión como en las redes de distribución 6.933.583 MWh.
Fuente: ABC
