El Ministerio de Economía y Finanzas anuncia el diseño de una fórmula técnica para actualizar periódicamente las tarifas de la ANDE, con el fin de asegurar su sostenibilidad.
El cambio podría impactar a hogares y empresas con aumentos más previsibles pero también más constantes. El ministro de Economía y Finanzas, Carlos Fernández Valdovinos, confirmó que el Gobierno está trabajando en una nueva metodología para la tarifa de la ANDE que contemple un ajuste "casi automático". Según sus declaraciones, la fórmula busca evitar que las tarifas de electricidad permanezcan años sin modificarse, como ha ocurrido hasta ahora.

Fernández Valdovinos explicó que la última subida significativa de la tarifa data de 2017, y desde entonces los costos —incluido el impacto del tipo de cambio— han quedado desalineados con las tarifas vigentes. "La poca sinceridad que se tiene con las tarifas hasta el momento" es uno de los problemas que, en su opinión, debe solucionarse.

La propuesta que se está diseñando plantea que la ANDE pueda aplicar incrementos periódicos sobre la base de variables técnicas —por ejemplo costos operativos, variación de precios de la energía, tipo de cambio—, en lugar de depender cada vez de un nuevo decreto político. El objetivo es dotar al sistema de mayor previsibilidad y transparencia.

Para el usuario residencial la medida implica varias consecuencias potenciales. Por un lado, la actualización automática puede reducir el impacto de saltos grandes en el precio de la luz —al dividirlo en ajustes más frecuentes—, pero también significa que se enfrentará a aumentos periódicos que reflejen costos reales más elevados. Las empresas demandantes del servicio también recibirán señales más claras sobre tarifas futuras, lo que afecta inversiones y planificación de consumo. La ANDE, entidad estatal estratégica en Paraguay, soporta una carga financiera importante: por ejemplo, los pagos a binacionales como Itaipú Binacional representan una parte sustancial de sus egresos. De ahí que el Gobierno subraye que la empresa debe disponer de ingresos suficientes para operar, invertir y mantenerse competitiva.

El sistema de ajuste automático también abre cuestiones de equidad social. Hogares con consumos más moderados podrían ver sensibilidad ante cada subida, y es clave que el diseño tarifario contemple mecanismos de protección para sectores vulnerables. Por ello, el reto para el Gobierno y la ANDE es equilibrar sostenibilidad financiera, inversión en infraestructura y carga asequible para los usuarios.

En definitiva, el anuncio marca un cambio de paradigma en la política tarifaria eléctrica en Paraguay: pasar de ajustes puntuales y esporádicos a un esquema técnico y periódico. Es decir, la luz ya no se ajustará de forma improvisada, pero cada revisión será más previsible y vinculada a los costos reales del servicio.

Fuente: El Nacional