El país supera a España en el ranking mundial, impulsado por instalaciones récord en 2021-2023. El hito de la energía eólica marina refuerza el potencial del hidrógeno verde y los centros de datos.
Brasil superó a España y subió una posición en el ranking de capacidad total instalada de energía eólica terrestre en el Global Wind Report 2025 (GWEC), divulgado este miércoles (23/4), alcanzando el quinto lugar, informó la Asociación Brasileña de Energía Eólica (Abeeólica).

El país registró la instalación de 3,27 gigavatios (GW) el año pasado, alcanzando los 33,7 GW, por detrás de China (478,8 GW), Estados Unidos (154,1 GW), Alemania (63,7 GW) e India (48,2 GW). A nivel mundial, la industria eólica alcanzó un nuevo récord con la instalación de 117 GW en tierra y en alta mar, totalizando 1.136 GW en todo el mundo.

El informe muestra que la industria eólica brasileña experimentó un período récord de nuevas instalaciones de parques eólicos terrestres, entre 2021 y 2023, impulsada principalmente por el mercado libre, a través de acuerdos privados de compra y venta de energía (PPA).

Según la publicación, “ya ​​se esperaba que las nuevas instalaciones se desaceleraran en 2024, debido a los recortes en la generación de energía renovable, la cancelación de subastas y otros obstáculos regulatorios”, señala GWEC.

El documento también destaca la aprobación del marco legal para la energía eólica marina en enero de este año, destacando que Brasil tiene un potencial estimado de 1,2 GW y la expectativa de una subasta de áreas a finales de este año, “impulsando nuevas industrias, como la producción de hidrógeno verde y la instalación de centros de datos”, evalúa.

Según GWEC, las medidas del Fondo Nacional sobre el Cambio Climático (FNMC) también ayudaron a reducir las tasas de interés y facilitar el acceso al crédito para proyectos de energía limpia.

A pesar de los desafíos económicos, dice el informe, el fabricante chino Goldwind abrió su primera fábrica fuera de China en Brasil; Vestas invirtió R$ 130 millones en una nueva planta en Ceará para fabricar turbinas V163-4,5MW; y empresas como HINE do Brasil han ampliado su infraestructura para satisfacer la creciente demanda de componentes eólicos.

El informe arrojó importantes logros en 2024, como la regulación de los parques eólicos marinos, el marco regulatorio del hidrógeno y el Mercado de Carbono. A pesar de la crisis que enfrenta Brasil en la industria eólica, logramos ascender en el ranking y ocupar el quinto puesto a nivel mundial. Sin embargo, al tratarse de una industria de infraestructura, el próximo informe debería reflejar con mayor claridad los impactos en el sector y también veremos una recuperación en los próximos años, si el país hace los deberes necesarios, explica Elbia Gannoum, presidenta ejecutiva de Abeeólica y vicepresidenta de la Junta Directiva de GWEC.

Costa afuera

GWEC pronostica que la energía eólica marina para el período 2025-2030 aumentará de 16 GW en 2025 a 34 GW en 2030, pasando del 11,8% de la nueva capacidad al 17,5% de la nueva capacidad para el final de la década.

La clave para ello, destaca el documento, es la energía eólica marina, que tuvo un año récord en subastas en 2024. El año pasado se adjudicó un total de 56,3 GW de capacidad eólica marina en todo el mundo. Europa lideró el camino con 23,2 GW y China con 17,4 GW. Una nueva ola de mercados también tuvo años históricos, con Corea del Sur permitiendo 3,3 GW, Taiwán (China) 2,7 GW y Japón 1,4 GW.

Según Ben Backwell, director ejecutivo de GWEC, si bien la energía eólica sigue impulsando la inversión y el empleo, además de mejorar la seguridad energética y reducir los costos para los consumidores, el entorno político es más volátil y las energías renovables están bajo ataque en algunas partes del mundo, lo que lleva a que los proyectos se paralicen en construcción y amenacen la certeza de la inversión.

La agresiva instigación de guerras arancelarias aumenta aún más la incertidumbre en las decisiones de inversión internacionales y amenaza con interrumpir las cadenas de suministro internacionales de las que depende la industria eólica. El coste total para nuestra industria de la amplia gama de aranceles declarados y amenazados que hemos visto, tanto generales como sobre productos específicos como el acero, aún no se ha calculado por completo, advirtió Backwel.

Fuente: ejes