Armin Dorgathen, presidente ejecutivo de YPFB, enfatizó que las sanciones responden a una normativa de seguridad estricta aplicable a todos los conductores de cisternas que ingresan a sus plantas de almacenaje de combustibles.
La última sanción se aplicó el pasado miércoles, cuando un conductor fue sorprendido con aliento alcohólico en la planta de Palmasola, lo que activó los protocolos de seguridad. El transportista, reincidente en esta conducta, fue suspendido de forma inmediata, indicó Dorgathen.
Fuente: Los Tiempos
Lea la noticia