Los precios del petróleo cayeron este jueves (1), después de que una serie de indicadores económicos apuntaran a la desaceleración de la economía estadounidense, y también con la renovada fortaleza del dólar en medio de un panorama global cauteloso.
En la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), el petróleo WTI para septiembre cerró con una caída del 2,05% (1,60 dólares), a 76,31 dólares por barril, mientras que el Brent para octubre, negociado en la Bolsa Intercontinental (ICE), retrocedió un 1,63% (EE.UU.). 1,32 dólares), hasta 79,52 dólares por barril.
Temprano en la mañana, los precios del petróleo abrieron cotizando al alza, impulsados por los riesgos geopolíticos ante un inminente ataque iraní a Israel. Sin embargo, a medida que avanzaba el día, el impulso se redujo y el petróleo no pudo continuar con el mayor aumento del año observado ayer.
Por la mañana, una combinación de indicadores estadounidenses (PMI industriales finales de julio que indican una contracción de la actividad y una caída de la inversión en construcción en junio) renovaron las preocupaciones sobre la demanda en la economía más grande del mundo y contribuyeron al cambio de rumbo de los precios, que comenzaron a retroceder. La caída luego se intensificó a medida que el dólar se fortaleció, mientras los inversores aumentaban su búsqueda de activos seguros.
También hoy, los principales líderes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se reunieron para discutir la actual política de recortes de producción y mantuvieron la política actual, como ya esperaban los mercados. Según Oxford Economics, todavía no se espera que las tensiones en Medio Oriente afecten los precios de las materias primas a largo plazo, y el aumento debería ser temporal, a menos que la infraestructura de los países de la región para la producción de petróleo se vea afectada. La consultora británica destaca que la OPEP tiene amplia capacidad excedente para suplir una interrupción momentánea en la región.
Además, Oxford añade que “la posible demanda más débil de China después de un tercer mes consecutivo de contracción manufacturera, y los posibles cambios en los recortes de producción por parte de la OPEP y sus aliados están aumentando la volatilidad del mercado y planteando nuevos riesgos a la baja”.
Fuente: Estadão Conteúdo