Ante una demanda más débil, las empresas comenzaron el mantenimiento estacional antes de lo habitual, cerrando plantas por períodos más largos.

Alrededor de 20 millones de bushels (540.000 toneladas) de capacidad de trituración estaban fuera de servicio en abril en la región del Cinturón del Maíz (un récord para el mes), incluidas grandes plantas de Archer-Daniels-Midland y Cargill, según CrushTraders. Se espera que en mayo se desmantelen al menos 10 millones de bushels.

Se trata de una señal preocupante para una industria que ha invertido miles de millones de dólares para ampliar la capacidad de transformar la soja en aceite, que puede utilizarse para producir diésel renovable.

Si bien los incentivos gubernamentales han creado una demanda creciente de combustibles más limpios provenientes de fuentes como los cultivos agrícolas, los envíos extranjeros de alternativas como sebo importado, aceite de cocina usado y aceite de canola están canibalizando la participación de mercado del aceite de soja.

La creciente competencia plantea dudas sobre cuánta capacidad se necesitará en el futuro.

"Aquellos proyectos que estaban muy avanzados continuarán y se completarán", dijo John Neppl, director financiero de Bunge Global, el procesador de semillas oleaginosas más grande del mundo, durante una conferencia telefónica con analistas el miércoles.

"Pero en realidad, todo lo que se ha propuesto o está en las primeras etapas, hemos visto que varios de ellos quedan en suspenso".

El aceite de soja representó el 32% de las materias primas utilizadas para producir biodiesel en enero, frente al 44% del año anterior y un mínimo histórico.

Esto se debe en parte a que el aceite de soja no es muy competitivo frente a fuentes alternativas, que son más baratas y tienen puntuaciones de intensidad de carbono más bajas, lo que permite mayores subsidios.

"La industria procesadora de soja de Estados Unidos enfrenta dificultades cada vez mayores" debido a los desafíos que plantean estas alternativas, dijo Susan Stroud, analista de granos de No Bull Ag en St. Louis.

Al mismo tiempo, el número de plantas de biodiesel está creciendo, llegando a 539 en enero, frente a las 384 del año anterior.

Los procesadores de soja tienen 21 proyectos en marcha para ampliar la capacidad en Estados Unidos, según Gordon Denny, consultor agrícola y ex director de compras de Bunge.

De ellos, cinco proyectos inician este año y competirán por la nueva cosecha que comienza a recolectarse en octubre. Esto creará una capacidad de procesamiento adicional de 495.000 bushels por día para competir por las nuevas semillas oleaginosas.

"Este aumento en la capacidad de trituración, además del uso de otras materias primas para producir diésel renovable, está creando una sorprendente falta de demanda de aceite de soja", dijo Denny.

Neppl dijo que la Agencia de Protección Ambiental debería revisar sus reglas que determinan cuántos galones de refinerías de biocombustibles deben agregarse a la mezcla de combustibles para motores de Estados Unidos.

Estos requisitos son parte del Estándar de Combustibles Renovables, cuyo objetivo es reducir los gases de efecto invernadero que dañan el clima y fortalecer la seguridad energética de Estados Unidos.

Los márgenes de aplastamiento, que alcanzaron niveles récord en 2022 y 2023, se están viendo presionados por el regreso de Argentina al mercado de exportación después de una sequía histórica, así como por el aumento de las existencias de aceite de soja.

En marzo, los inventarios de petróleo alcanzaron los 1.850 millones de libras, un aumento récord desde febrero, según Stroud.

La competencia se volverá más intensa durante la cosecha de otoño, cuando comiencen a funcionar más plantas trituradoras.

Como resultado, las empresas están evaluando sus opciones sobre cuánta capacidad reactivar.

"Los márgenes más pequeños contribuyen al tiempo de inactividad, pero las empresas también se están tomando su tiempo después de trabajar tan duro como pudieron en 2022 y 2023", dijo Kent Woods, propietario de CrushTraders. "El mercado es realista en cuanto a que las cosas se pondrán difíciles a medida que avancemos".

Fuente: Bloomberg Línea