El Grupo CCR es una de las empresas que estudia el tema y está evaluando una estructura inédita para la implementación del primer VLT (Vehículo Ferroviario Ligero) propulsado por hidrógeno en Brasil. Para ello, la empresa lleva a cabo una cooperación técnica con socios que han desarrollado modelos exitosos de transporte ferroviario abastecidos con recursos sostenibles en Asia y Europa. El estudio de viabilidad se elaborará en 2024.

Considerado un combustible limpio, el hidrógeno verde (H2V), cuyo uso sólo emite vapor y agua condensada, se obtiene a partir de energías renovables, como la eólica y la solar. Debido a esta condición, el sector energético ha entrado en el radar de las empresas que buscan reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

La concentración de estos gases en el mundo batió un récord en 2022, según un boletín de la OMM (Organización Meteorológica Mundial), publicado en noviembre de 2023. Sólo el CO2, una de las principales causas del calentamiento global, estaba un 50% por encima del nivel anterior. -era industrial para el 1er turno.

Según el presidente de CCR Mobilidade, Marcio Hannas, el objetivo de la empresa con el proyecto es aprovechar el potencial brasileño de producción de hidrógeno verde para abastecer el transporte ferroviario de la concesionaria. Aunque los planes incluyen inicialmente la explotación del VLT, un medio de transporte local para distancias cortas, en el futuro podrían ampliarse a trenes de pasajeros de mayor tamaño donde no sea posible electrificar la línea. “Nuestra intención es utilizar hidrógeno verde fabricado en Brasil. Aquí tenemos las condiciones adecuadas para esta producción”, reforzó.

La matriz energética brasileña, con 83,6% de la energía proveniente de fuentes renovables, según datos del Sistema de Información de Generación Aneel (Agencia Nacional de Energía Eléctrica), coloca al país en una posición destacada para proyectos de producción de hidrógeno verde, según estudios sobre el tema. .

Una encuesta de 2022 sobre hidrógeno sostenible, realizada por la CNI (Confederación Nacional de la Industria) con datos de la AIE (Agencia Internacional de la Energía), señala que la movilidad se encuentra entre los principales mercados para absorber la producción futura de hidrógeno, siendo la prioridad del 25% de proyectos globales. La investigación mapeó iniciativas de 57 países relacionadas con el combustible.

Además de contribuir a la descarbonización del transporte, según el estudio, el uso del recurso tiene el potencial de mejorar la vida de los habitantes de las grandes ciudades, reduciendo la contaminación y, en consecuencia, los problemas de salud locales.

La encuesta “Hidrógeno verde: una oportunidad de generar riqueza con sostenibilidad, para Brasil y el mundo”, de 2021, de McKinsey & Company, afirma que el país tiene potencial para convertirse en líder mundial en la producción del combustible, con demanda Se calcula que, de aquí a 2040, la inversión en el mercado interno ascenderá a entre 10.000 y 12.000 millones de dólares y otros 6.000 millones en exportaciones.

Casos alrededor del mundo

CCR está recopilando información sobre la viabilidad técnica, económica y de ubicación para el montaje de la estructura del VLT abastecido con combustible sustentable en Brasil. Con el objetivo de identificar oportunidades y establecer alianzas, la empresa realizó visitas técnicas a un proyecto piloto de VLT impulsado por hidrógeno en Corea del Sur, de propiedad de la empresa surcoreana Hyundai Rotem, proveedora de CCR Metrô Bahia y de otras modalidades de la empresa brasileña.

“Utilizaron la tecnología que se utiliza hoy en los coches de hidrógeno. Este proyecto aún no está en operación comercial, utiliza una línea de prueba y recorre aproximadamente 150 kilómetros con una carga de hidrógeno. Pero como un VLT viaja en circuitos más pequeños (dentro de la misma ciudad), 150 kilómetros es una buena autonomía y el tiempo de repostaje es de 15 minutos”, dijo Marcio.

En Alemania, CCR buscó la experiencia de Alstom, fabricante del primer tren de pasajeros propulsado por hidrógeno que entró en funcionamiento en el mundo, con una autonomía de alrededor de 1.100 kilómetros. El fabricante francés fue proveedor de la tecnología y los vehículos utilizados en el VLT Carioca, operado por CCR en la capital de Río de Janeiro, y lidera la producción de 36 nuevos trenes para las Líneas 8 y 9 del sistema ferroviario metropolitano de São Paulo. también gestionado por el grupo brasileño.

En ambos casos, se utiliza hidrógeno verde para impulsar el motor eléctrico, al mismo tiempo que suministra baterías capaces de almacenar el exceso de energía. Esta energía extra se utiliza cuando el motor más la necesita, como al acelerar.

El hidrógeno verde también es una alternativa para llevar el transporte fepor carretera a regiones que cuentan con pocas infraestructuras y donde no es posible conectar redes eléctricas y, por tanto, se siguen utilizando trenes propulsados ​​por diésel. Para el presidente de CCR Mobilidade, aunque los trenes de hidrógeno actualmente tienen un coste de fabricación más elevado que otros, la tendencia es que, con el paso de los años, se vuelvan más ventajosos económicamente.

“Entiendo que será más atractivo tener una operación de hidrógeno verde porque, actualmente, la inversión en la parte eléctrica, cuando se implementa una nueva línea, es importante, al igual que el costo de mantenimiento. Entonces, la tecnología del hidrógeno también traerá beneficios económicos”, afirmó Marcio. El ejecutivo destaca que invertir en hidrógeno es ideal para nuevos proyectos, ya que el costo de transición de una línea existente alimentada por electricidad a combustible verde es alto.

Sostenibilidad en CCR

El Grupo CCR pretende abastecer todos sus modos de movilidad urbana con fuentes 100% renovables hasta 2025, incluidos trenes, VLT y metros. Actualmente, el 95% de los modos utilizan energía procedente de recursos renovables.

El presidente de CCR Mobilidade explicó que esto ocurre a través de compras en el mercado libre a proveedores certificados que producen energía limpia, principalmente de plantas solares. La energía consumida que proviene del Sistema Interconectado Nacional también recibe la certificación de que proviene de fuentes sustentables.

Las metas del Grupo CCR para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero fueron aprobadas en 2023 por la SBTi (Science Based Targets Initiative), lo que significa que la empresa asumió públicamente un compromiso con la descarbonización con la iniciativa internacional, fruto de la cooperación entre varios organismos, incluida la ONU Global. Pacto (Naciones Unidas).

Los objetivos incluyen una reducción del 59% de las emisiones de CO2 en los alcances 1 y 2 (emisiones directas e indirectas, respectivamente) y del 27% en el alcance 3 (emisiones en toda la cadena que involucra a la compañía), al año 2033, en relación al año base 2019. Para ello, el grupo adoptó medidas como duplicar la capacidad de producción de sus propias plantas fotovoltaicas en 2023 y utilizar biocombustibles en el 100% de la flota de vehículos flexibles hasta 2025.

Fuente: Poder 360