El más reciente informe de Producción y Taladros de Campetrol reveló que la actividad de taladros, los pozos exploratorios y la sísmica tuvieron reducciones durante el año pasado.

En el caso de los pozos exploratorios, entre enero y septiembre (último dato disponible) la caída acumulaba 30,5 % frente al dato que se había registrado en el mismo lapso de 2022. El acumulado en los primeros nueve meses alcanzó 41 pozos, que representa una disminución de 18.

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Unirme al canal de WhatsApp de noticias PORTAFOLIO El escenario en el caso de la actividad sísmica es aún más complejo. Según los datos de la Cámara Colombiana de Bienes y Servicios de Petróleo, Gas y Energía, muestra que se presentó una caída de 49% en lo corrido del año.

En total, la actividad sísmica 2D pasó de 1.904 kilómetros en 2022 a 973 kilómetros el año pasado, lo que representa una baja de 931 kilómetros entre un año y otro.

Además de esto, desde mayo la sísmica adquirida se mantuvo en el mismo nivel, con lo que no hubo ninguna actividad adicional desde el quinto mes del año.

De igual manera, la actividad de taladros también evidenció una tendencia bajista.

Durante 2023, el promedio acumulado de taladros fue de 126, que significa una reducción de 12,5%, expresada en 18 equipos menos que durante el año anterior.

Campetrol advirtió que este comportamiento en esta actividad implicó la pérdida aproximada de 19.500 empleos, 3.000 directos y 16.500 indirectos. Ahora bien, desagregando los datos por tipo de equipo (perforación y reacondicionamiento) se evidencia una contracción de 17,2% para los primeros, puesto que el promedio de máquinas activas fue de 42 en los 12 meses. Estos fueron los que mayor pérdida de mano de obra significaron, con un aproximado de 14.300 puestos.

Con respecto a los de workover o reacondicionamiento, el informe detalla que en el año hubo un promedio de 85 equipos trabajando, lo que representa una contracción de 10% anual.

De acuerdo con los datos presentados por la Cámara de Bienes y Servicios, el descenso se explicó por la terminación de algunos contratos en Santander.

La pérdida de trabajos relacionada con esta dinámica es de 5.200, de los cuales 800 fueron directos y 4.400 indirectos.

Fuente: Portafolio