El crudo de referencia para Ancap, concluyó esa jornada en US$ 77,04 frente a los US$ 85,91 que costaba el Brent para marzo de 2023 el pasado 30 de diciembre, última sesión de 2022. En total, supone una caída de US$ 8,87 frente a un año atrás. Respecto a la negociación del día anterior, el jueves, cuando terminó en US$ 78,39, el Brent se dejó el viernes un 1,72% de su valor, una baja de US$ 1,35.
El año para el Brent ha sido un vaivén de sensaciones, que fueron desde rozar los US$ 100 a finales de setiembre, a alcanzar mínimos cercanos a los US$ 70 en las últimas semanas. Pese a todo, la robusta producción estadounidense y la débil demanda global han mantenido a lo largo del año los precios en torno a la barrera de los US$ 80, que es donde los analistas creen que se mantendrá en 2024.
Los recortes en la producción anunciados por la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+), influyeron en las variaciones registradas, en un contexto macroeconómico marcado por la fuerte inflación, que llevó a los bancos centrales a subir las tasas de interés para enfriar la economía. Además, la fortaleza del dólar estadounidense y la suba de los bonos de ese país repercutieron sobre la tendencia del crudo en los últimos meses
Fuente: EFE