Según Ancap, en los próximos días “se contará con la máxima capacidad de despliegue de todos los contratistas para ejecutar obras que extenderán la vida útil de la refinería por varias décadas”.
El cronograma de tareas, según la planificación presentada por el contratista principal de las tareas críticas en la unidad de cracking catalítico y aprobado por Ancap, establece que el 20 de marzo de 2024 la refinería estará en condiciones de plena operación, de no mediar condiciones climáticas adversas o imprevistos, informó el ente. Originalmente se había previsto que la parada de mantenimiento comenzara en setiembre y finalizara en diciembre. Pero por medidas sindicales ese primer cronograma no pudo ejecutarse con normalidad y las obras terminarán casi tres meses después, lo que implica un perjuicio económico para la empresa pública.
Fuente: El Obervador