­ El economista Francisco Leitz plantea la monetización del petróleo mediante la oferta a los acreedores nacionales e internacionales de la Nación de títulos valores basados en el barril de petróleo a precio del mercado diario del crudo.
Explica Leitz que permitiría emitir deuda en base a un bien real transable y solicitado, abundante y sin necesidad de endeudarse en términos monetarios, cumpliendo los compromisos con los acreedores e inversionistas con el mismo bien en cantidades, precios y fecha de entrega previamente convenidos.

Refiere que los mercados a futuro de productos fueron desarrollados para ayudar a los productores, procesadores y comerciantes a mejorar sus prácticas de mercado y comercialización. Los productores buscan protección contra cambios de precios desfavorables de los productos a elaborar o a procesar, comprometiéndose a entregar o comprar ciertas cantidades de productos a futuro al precio convenido Los inversionistas privados e institucionales buscan beneficiarse de cambios de precios futuros de los productos mercantiles.

Colocan por lo general sus órdenes de compra-venta a través de casas de bolsa de productos mercantiles. Las casas de bolsa mercantiles y sus corredores buscan también beneficiarse de los cambios de precios de los productos negociados a futuro y ejecutan las órdenes de los inversionistas privados e institucionales y las suyas propias, tanto como el marco regulatorio lo permita.

Debido a que por lo general la cantidad de productores o empresas buscando protección contra bajas de precios, en un cierto momento no es la misma que la cantidad de participantes buscando protección contra alza de precios, se necesitan otros participantes en este mercado. El beneficio para el inversionista privado o institucional, por haber aportado liquidez, es la posibilidad de realizar un beneficio con gran apalancamiento, si acierta en la dirección correcta y plazo adecuado de la evolución de los precios. Los corredores a su vez aportan liquidez al mercado, si están dispuestos a comprar o vender, por cuenta propia, beneficiándose de las mínimas variaciones de precio.

Contratos a futuro

Es razonable establecer que el surgimiento de los contratos a futuro del petróleo ha tenido un efecto estabilizador, en los precios del petróleo. Mientras no menos cierto es que el precio se ha disparado desde finales de la década de los 80’s, también es cierto que el mundo ha crecido significativamente -lo cual implica incremento en el consumo- y mantener el suministro, se ha hecho cada vez más complicado.

Las limitaciones naturales en materia de suministro y el incremento en la demanda puede explicar, en mayor grado, la incidencia en el alza o volatilidad de los precios del petróleo. Cuando miramos la situación desde esta perspectiva, la presencia de los contratos de petróleo a futuro ha permitido a los suplidores cubrir la demanda y autoprotegerse de la incertidumbre en precios.

Es un hecho cierto que nadie puede predecir el futuro del mercado petrolero con un 100% de precisión, sin embargo existen pocas y posibles tendencias relacionadas con el mercado a futuro.

Futuro del petróleo

Hasta ahora, la tecnología no ha avanzado tanto como para haber logrado reemplazar el petróleo. Todavía sigue siendo la principal fuente de combustible para el transporte. Virtualmente irremplazable cuando se trata de petroquímicos.

Se estima que el mercado petrolero crecerá un 20% para el año 2030, debido principalmente por el incremento del consumo y al crecimiento del sector transporte. Por esta razón, se piensa que el mercado de los contratos a futuro serán a la larga, la manera permanente de estabilizar los mercados. El primer contrato petrolero a futuro, como se conoce actualmente, se vendió el 30 de marzo de 1983 en Nueva York

Antes de eso, grupos económicos en los Estados Unidos trataron de controlar, en cierto modo, los precios del petróleo. El control del precio del crudo no se “les salió de las manos” hasta que se desató la Guerra del Yom Kippur en 1973 y el embargo subsiguiente de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP); el cartel del petróleo del Medio Oriente que pretendieron presionar al alza de los precios.

Los precios cayeron nuevamente de 1975 hasta el 78 resurgiendo con la caída del Sha de Irán en el 79, el inicio de la guerra Irak-Irán, y el advenimiento del Ayotolá Khomeneini. Los precios nuevamente cayeron de 1983 en adelante. En ese periodo los primeros contratos petroleros fueron negociados en el New York Mercantil Exchanged. (NYMEX).

Estos contratos petroleros se basaron en el precio indicativo del West Texas Intermediate WTI, como se aplica hasta la fecha. Parcialmente debido a ese desarrollo, los precios del petróleo continuaron en caída hasta tocar fondo en 1988.

El precio no aumentó significativamente hasta la invasión de Kuwait por Irak en 1990. Desde la operación Desert Storm en 1991, los precios aumentaron hasta de 145 $/barril en julio del 2008.

El precio se mantuvo estable desde esa fecha hasta mediados del 2015, por alrededor de los 100$/barril, motivando al presidente de la Total Oil, Christophe de Margerie, de crear una moneda “Brent” debido a la estabilidad de los precios y para aliviar y asegurar a los países productores ingresos regulares y previsibles.

Fuente: El Universal