Según los últimos reportes, se evidencia el avance de este fenómeno natural de forma lateral en los márgenes del río Piedra, sector de San Luis en Napo.
“Esto pone en riesgo los tramos de los ductos, ya que la distancia entre la erosión y las tuberías se ha acortado”, señala la petrolera estatal en un comunicado. Debido a esto, Petroecuador anunció la construcción de dos obras nuevas y en un plazo de 21 días. Se trata de un bypass para proteger el SOTE y otro para el poliducto. Ambos tendrán una longitud de 422 metros cada uno y con una inversión de USD 1 millón.
Los trabajos se realizarán de inmediato y con la finalidad de evitar retrasos en el transporte de crudo desde la Amazonía hasta Esmeraldas. También se busca prevenir atrasos en el transporte de combustibles desde Shushufindi hasta Quito. Desde el pasado 11 de mayo, los técnicos de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec) ya habían alertado que el incremento de las lluvias en la Cuenca Amazónica han causado una erosión de tipo lateral y otra de profundidad en el río Coca. Por otra parte, Petroecuador también informó que sigue trabajando en la construcción de una séptima variante del SOTE y en la quinta variante del poliducto. Ambas obras tienen un costo de USD 5 millones.
Tanto la infraestructura petrolera, como la captación de agua de Coca Codo Sinclair y varias comunidades del cantón El Chaco, continúan en peligro de ser destruidas por la erosión del río Coca. De hecho en abril de 2020, este fenómeno ya rompió el Oleoducto de Crudos Pesados (OCP) y el oleoducto estatal SOTE, así como el poliducto.
Fuente: Primicias