La consultora CPA observa una elevada incertidumbre en Paraguay y mantiene su expectativa de crecimiento para este año en 3,5%, mientras que para el 2022 estima un incremento del producto interno bruto (PIB) en 5%.
Un escenario internacional favorable puede contribuir a cumplir con las proyecciones, pero los riesgos de un lento proceso de recuperación siguen latentes debido a la actual crisis sanitaria y política.

Para la economista Patricia Goto, las oportunidades para el 2022 están centradas en variables de inversión, tanto del sector agrícola como de los proyectos de gran envergadura que se instalan en el país entre este año y el siguiente, refiriéndose a la Cementera Concepción y la planta de celulosa, Paracel. En cuanto a la inflación, la consultora estima que llegará a 3,2% al cierre de este 2021, por debajo de la proyección del Banco Central del Paraguay (BCP) y a 3,4% un año después.

En cuanto al comportamiento de los diferentes sectores económicos, se espera que la construcción muestre el mismo dinamismo, aunque tal vez se produzca una desaceleración en el ritmo de inversión pública, debido sobre todo a los gastos sociales para sostener a los grupos más vulnerables. El agro también promete buenos resultados, aunque su impacto en el empleo es de solo 20% sobre el total de la población ocupada, mientras que el área de servicios, que concentra el 61% del empleo, todavía muestra un gran debilitamiento.

Goto advirtió además que la incertidumbre sanitaria y política podría retrasar el proceso de recuperación económica. Escenario global. El analista Gabriel Oddone por su parte indicó que las noticias del mercado internacional no son malas para Paraguay, ya que las tasas de interés van a permanecer relativamente a la baja, con flujo de capitales positivos y por tanto con capacidad de colocar deudas a tasas todavía razonables, mientras que el dólar permanecerá relativamente débil, lo que supone que los precios de commodities no se debilitarán. Si bien se prevén episodios de volatilidad cambiaria, este fenómeno será transitorio.

Ventaja en los precios de la soja se sentirá en el 2022

Se estima que el sector sojero recibirá este año USD 200 más por tonelada que la zafra anterior, lo que contribuirá una mayor capacidad de inversión que sin embargo podría concretarse recién el próximo año mediante la expansión del área de siembra. La analista Patricia Goto señaló que si bien aporta a la dinamización de la economía por su conexión a las agroindustrias y estas a su vez con los servicios, no hay seguridad de que podrá nuevamente compensar el shock en el sector terciario. El sector cárnico también registra un mayor movimiento, pero no tiene mucha participación en el PIB.

Fuente: Última Hora