“Estas normativas sólo establecen un procedimiento abreviado por parte del Comité Nacional de Bioseguridad y en el caso del maíz, la posibilidad de hacerlo de forma regionalizada en base al Estudio de zonificación para el uso de maíz GM en Bolivia, elaborado por el INIAF”, dijo.
El dirigente señaló que la abrogación de los decretos sería un retroceso para el sector agro-productivo del país, porque implicaría que miles de productores, principalmente pequeños, se vean imposibilitados de tener acceso a esta herramienta tecnológica que permite disminuir sus pérdidas por efectos climáticos adversos, como la sequía o por el ataque agresivo de plagas como el gusano cogollero.
Fuente: Los Tiempos
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