durante los primeros meses de la pandemia por el COVID 19 en el mundo, el precio del galón (3,785 litros) de gasolina bajó a pisos históricamente inusuales.
Véase que por ejemplo el 23 de marzo de 2020 (primer mes de pandemia) el galón de referencia de la EIA, llegó a un piso de U$S 0.374 FOB (unos 4 pesos por litro de gasolina), recuperándose levemente 4 días después, cuando esta medida internacional de casi 4 litros, llegó a los U$S 0.458.
La pregunta que se hicieron muchos uruguayos fue ¿por qué con estos precios “Free On Board” de un galón de gasolina, en nuestro país ese mismo combustible seguía costando 55 pesos el litro? (ref. Nafta Super 95).
MIRADA LARGA
Tal vez en este punto la respuesta solamente se puede encontrar analizando la LUC, y su nueva normativa de fijación de precios con revisiones mensuales, con una mirada larga de toda la cadena desde el petróleo en adelante hasta el surtidor.
El último registro de la EIA que data del 2 de marzo de 2021, coloca como referencia de costo del galón en U$S 1.874 FOB (unos 49 centavos de dólar el litro de gasolina), aprox. 22 pesos uruguayos, casi la misma referencia de URSEA para similar período ($ 22.90).
PRECIO SE MULTIPLICÓ POR 4
En un año -según EIA- el precio del galón de gasolina aumentó unas cuatro veces, y solamente cuando le demanda volvió a superar a la oferta, fruto de la recuperación mundial, el precio se estabilizó (el sector de los estacioneros en Uruguay también sufrió esta situación, aunque ya volvió a niveles casi normales).
Utilizando un razonamiento lógico se podría deducir que, si nos basáramos en una de las referencias internacionales utilizadas por URSEA (la EIA) para fijar el promedio del precio FOB de un litro de gasolina en marzo de 2020 (4 pesos), y considerando que en nuestro país se comercializaba en el surtidor a poco más de 55 pesos (mercado regulado), de haber estado vigente la LUC, el precio en el surtidor debería haber oscilado entre los 36 y 40 pesos el litro, tomando en cuenta el costo CIF, más la posterior carga fiscal uruguaya (IMESI), tasas, biocombustibles y distribución.
Fuente: Surtidores