El precio promedio de un litro de combustible saltó de R $ 3.221 a R $ 3.901, según la encuesta semanal de la ANP. A pesar de ser más cara que el etanol, la gasolina regular subió menos: 14,6% de enero a marzo. El precio promedio del litro de gasolina en el país pasó de R $ 4,622 a R $ 5,299.
En el comercio mayorista, el aumento es aún mayor. Según el Centro de Estudios Avanzados en Economía Aplicada (Cepea), el etanol acumula un incremento del 35% en las plantas del Centro-Sur, la principal región productora del país.
Dependiendo del modelo de vehículo, el etanol se vuelve ventajoso cuando cuesta hasta o menos del 75% del valor de la gasolina. Según la encuesta de la ANP, solo seis estados alcanzaron esta proporción en la primera semana de marzo: Goiás (68,9%), Mato Grosso (69,3%), Minas Gerais (72,8%), Amazonas (74,4%), Mato Grosso do Sul ( 74,7%) y Sergipe (74,9%).
En algunos estados, el precio del etanol casi iguala al de la gasolina. Las mayores proporciones se registraron en Amapá (93,9%), Rio Grande do Sul (91%), Santa Catarina (85,9%) y Pará (83%).
Demanda y la oferta
Aunque el etanol es desventajoso en la mayoría de los estados, la demanda del sustituto de la gasolina está aumentando. Según la última edición del Boletín de Seguimiento Covid-19, del Ministerio de Minas y Energía, el consumo de gasolina en 2021, hasta el 23 de febrero, había caído un 4,1% respecto al mismo período del año pasado. Por el contrario, el consumo de etanol hidratado subió un 6,1% en la misma comparación.
A la mayor demanda de etanol se suman factores relacionados con la zafra de caña de azúcar. La tradicional temporada baja, a principios de año, encarece el etanol en los primeros cuatro meses. Este año, sin embargo, la oferta seguirá siendo baja durante más tiempo.
Según el Sindicato de la Industria de la Caña de Azúcar (Única), la cosecha de este año debería retrasarse debido a la sequía del segundo semestre del año pasado en el Centro-Sur. Con menos lluvia en la primavera, las plantaciones de caña de azúcar están demorando más en desarrollarse, y los ingenios posponen la cosecha que generalmente ocurre a principios de abril.
Durante la temporada baja, la producción de etanol de maíz generalmente sustituye al combustible de la caña de azúcar. El ritmo, sin embargo, es insuficiente para reponer la oferta. Hasta mediados de febrero, según la última encuesta de Única, la producción de etanol acumulaba 29.680 millones de litros, un 8,54% menos que los 32.450 millones de litros obtenidos en el mismo período en la zafra 2019/2020.
Fuente: Agencia Brasil