En total, las dos empresas productivas del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) generaron ingresos propios por 805,031 millones de pesos en el 2020, de los cuales 88% se obtuvieron a través de la venta de bienes y servicios que realizan.
De esta manera, los recursos que generaron las empresas representaron 15% del total de los ingresos presupuestarios del sector público, que fueron por poco más de 5.3 billones de pesos al cierre del año pasado.
La disminución, de acuerdo con Verónica Zepeda, catedrática de la Escuela Bancaria Comercial, se explicaría por el impacto que tuvo el Covid-19 en la actividad económica y si bien es una caída natural, es preocupante ya que no sólo impacta en las finanzas públicas, sino que también podría generar una revisión por parte de las calificadoras a estas empresas y, en el peor escenario, pasarle factura a la calificación soberana.
“Evidentemente afectó la etapa de confinamiento que vivimos y las restricciones de movilidad. En el caso de Pemex, ese ha sido uno de los factores muy importante que impactó en la venta de los combustibles. En el caso de la CFE, también es la nueva manera en que estamos trabajando, así como reformas y/o propuestas que han afectado negativamente al sector”, agregó.
A detalle se observó que Pemex, quien está en la mira de las calificadoras internacionales por suponer un riesgo para las finanzas públicas, fue la que presentó una mayor caída en los recursos que genera.
De enero a diciembre pasados, la petrolera a cargo de Octavio Romero Oropeza tuvo ingresos por 407,536 millones de pesos, lo que significó una disminución de 24.7% en su comparación anual.
En tanto la CFE, empresa encargada de controlar, generar, transmitir y comercializar la energía eléctrica en el país, tuvo ingresos por 397,494 millones de pesos, 10.3% menos que en el año previo.
Gasto es mayor
Además de tener menores ingresos propios en conjunto, las empresas ejercieron un mayor gasto del que generaron. En los 12 meses del año pasado el gasto total de Pemex y CFE sumó 865,516 millones de pesos, es decir, 60,485 millones de pesos más que los que obtuvieron como ingresos propios.
“Este déficit, normalmente, no se había dado pero en la parte del sector energético; para Pemex, hay factores externos que han contribuido a que sus costos aumenten. Es un hecho que Pemex ha trabajado con números hasta cierto punto no óptimos en cuanto a los costos, y han tenido que mantener ciertos contratos y niveles de gasto”, señaló la catedrática de la EBC.
En este sentido, apuntó que es probable que este año el gasto en las empresas productivas se incremente, mientras que los ingresos podrían mantenerse en el mismo nivel que el año pasado, algo que dependerá del proceso de reactivación económica.
Del gasto que tuvieron las empresas, más de la mitad (53%) se destinó al gasto de operación, mientras que 239,071 millones de pesos fueron para inversión física y 107,332 para el pago de pensiones y jubilaciones de los trabajadores de Pemex y la CFE.
Fuente: El Economista