Con una producción diaria de 15.278 barriles de shale oil -registrada en diciembre del año pasado- y en solo tres años de operación, Vista, la compañía que lidera Miguel Galuccio, se convirtió en el segundo productor de petróleo no convencional de Vaca Muerta.
Desde 2018, momento en el que comenzó a operar en la Argentina, Vista aumentó más de un 24% su producción de hidrocarburos y redujo sus costos en un 43%, consolidando un modelo eficiente, rentable y con métricas operativas equivalentes a las compañías independientes de Permian y de Eagle Ford, en los Estados Unidos.
Vista produjo más 20% en el último trimestre y rompió su récord de extracción de crudo La perfomance de la empresa demuestra además que Vaca Muerta es un lugar donde las compañías más chicas e independientes del shale pueden desarrollar sus planes alcanzando buenos números de producción y eficiencia.
Según datos oficiales de diciembre, Vista se ubica solo por debajo de la petrolera con mayoría estatal que tiene el 57% de la producción de shale. La compañía de Galuccio alcanza el 12% y por debajo quedaron Shell (10%), Pan American Energy (7%), y Pluspetrol (3%). A fines de 2020, la compañía logró un aumento del 20% de la producción con respecto al trimestre anterior, impulsado en parte por la puesta en producción de cuatro nuevos pozos en el mes de diciembre.
Esto marcó una recuperación en un año golpeado por la caída de la demanda de combustibles y por la pandemia del covid-19. Además, retomó su plan de crecimiento en Bajada del Palo Oeste, el bloque que opera en Vaca Muerta, donde ya cuenta con 20 pozos en producción.
En el área, Vista exploró con éxito un tercer nivel productivo, que amplió el potencial del bloque, permitiéndole ampliar su inventario existente de 400 pozos a 550. La existencia de distintos niveles de navegación en Vaca Muerta es uno de los atributos que la siguen posicionando como un play no convencional de clase mundial, que puede otorgar amplias posibilidades de crecimiento para las empresas que ya operan, y para potenciales socios estratégicos que esperan sumarse.
En términos de eficiencia, Vista ha sido consistente y ha implementado mejoras en sus procesos. Desde la puesta en producción de su primer pozo, la compañía ha aumentado la velocidad de perforación en un 81%. También logró una reducción del 21% en los costos de perforación por pie lateral y una disminución del 40% de los costos por etapa de completación.
El costo de desarrollo de pozos también se redujo en un 34% llegando a 11 millones de dólares por pozo. En estos tres años de recorrido, la empresa redujo su costo de desarrollo en un 29%.
Con el foco puesto en el desarrollo de Vaca Muerta para este 2021, Vista proyecta la puesta en producción de cuatro pozos por trimestre con el objetivo de sostener el crecimiento de la producción.
Fuente: La Política OnLine