Conforme a una evaluación realizada por el Instituto del Seguro Agrario (INSA), en lo que va del año más de 56.000 hectáreas de papa, maíz, trigo y quinua fueron afectadas por granizo, inundaciones, heladas o sequía pero las pérdidas sólo alcanzan a 10.000, por lo cual el abastecimiento de estos alimentos está garantizado.

“En términos de superficie cultivada no es significativo, que quiere decir aquello, que no va haber un desabastecimiento de estos cultivos”, anunció el director de Estudios Productos y Riesgos del INSA, Cristian Aliaga.

Conforme a la citada evaluación de siniestros en el país, a partir de diciembre el INSA iniciará el proceso de pago de indemnización a los productores cuyos cultivos fueron afectados por los fenómenos climáticos adversos.

Fuente: La Razón

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