“Repsol y New Stratus Energy (NSE) han firmado un acuerdo preliminar sobre la transferencia de todos los activos de Repsol Ecuador a NSE, a la espera de la aprobación de las autoridades ecuatorianas pertinentes, que han sido debidamente notificadas. Esta operación se enmarca en la gestión activa del portafolio que está llevando a cabo Repsol”, dijo la empresa con sede en Madrid, ante la consulta de este Diario.

La noticia llegó en primera instancia por un comunicado internacional emitido por New Stratus Energy (NSE), con sede en Calgary, Alberta (Canadá), que explicó que se ha firmado una carta de intención con Repsol para la transferencia de todos los activos, pero indicó que la concreción de la transacción depende de aprobaciones regulatorias como la autorización previa del Ministerio de Energía y Recursos no Renovables de Ecuador y de la Superintendencia de Control del Poder de Mercado, así como de las aprobaciones habituales de TSX Venture Exchange (Bolsa de Canadá).

Uno de los datos que más ha sorprendido es el monto de la transacción que, según el anuncio de NSE, sería de $ 5 millones como pago por la cesión de activos. El pago sería en dos cuotas iguales, aunque podrían darse adicionales pagos contingentes vinculados a ciertas circunstancias, como por ejemplo que ocurriera una extensión del término de los contratos de servicio (máximo $ 12 millones). La transferencia está siendo acompañada por Laurentian Bank Securities Inc. y Horizon Capital, que se desempeñan como asesores financieros en esta transacción.

La empresa canadiense, que tiene como presidente y director ejecutivo al venezolano José Francisco Arata (exdirectivo del grupo PDVSA), explicó que a la fecha las partes han presentado su solicitud de autorización al Ministerio de Energía y que New Stratus presentará la petición a la Autoridad Antimonopolio de Ecuador en los siguientes siete días. Arata comentó que “esta transacción es parte de la estrategia de la corporación de consolidar su presencia en las cuencas geológicas subandinas.

New Stratus Enery es una empresa poco conocida en el ámbito petrolero. Hay ciertas noticias que la relacionan con la empresa Pacific Stratus Energy y Pacific Rubiales, que habían tenido inconvenientes en la operación petrolera en Colombia, tanto por un tema de evasión de impuestos como por supuestos malas prácticas laborales.

Por su parte, una alta autoridad del Ministerio de Energía indicó que los reglamentos exigen que la compañía cesionaria (la que recibe los activos) bloque petrolero tenga al menos la misma capacidad técnica y financiera de la cedente (la que los entrega), para que no ocurra un deterioro en la calidad de la contratista del Estado.

La compañía que intenta adquirir a Repsol no tiene esos requisitos, pues es una empresa minúscula y sin mayor experiencia petrolera. En cambio, Repsol es una compañía de mucha trayectoria y solvencia. Entonces el ministerio está analizando si es procedente o no otorgar el permiso para tal venta, indicó la fuente.

Fuente: El Universo