Armand Delon, ingeniero de Química y Petróleo por la Universidad Central de Venezuela, indicó en Twitter que pasadas las 8:00 am de este martes el buque estaba cerca de cruzar el estrecho Bocas de Dragón. Tres horas después, el tanquero se ubicaba en el golfo de Paria. El Nabarima amenaza con convertirse en una tragedia ecológica gigantesca, con más de 1 millón de barriles.

La última vez que se conoció el destino del tanquero Ícaro fue cuando zarpó el 3 de octubre desde la refinería Cardón, en el Complejo Refinador Paraguaná, en el estado Falcón, rumbo a Cuba. El Departamento del Tesoro de Estados Unidos lo sancionó en diciembre de 2019 por violar las medidas contra el régimen y por enviar petróleo al régimen cubano.

El régimen de Nicolás Maduro no ha emitido una comunicación para aclarar si el Ícaro será destinado a disminuir aproximadamente la mitad de la carga que tiene en Nabarima. Pero tampoco lo ha hecho para informar sobre la situación del buque y los riesgos.

El Nabarima, que es propiedad de Pdvsa, habría sido abandonada con cerca de su capacidad máxima de transporte cuando Estados Unidos impuso por última vez sanciones al régimen socialista. Las denuncias indican el total abandono de una embarcación con gran cargamento de petróleo mientras se deteriora en el mar.

El Ministerio de Exteriores y de Asuntos Extranjeros de Trinidad y Tobago informó en un comunicado de que se mantienen alertas ante la amenaza que podría provocar un derrame de crudo. Dijo además que su equipo de expertos está listo para acudir al área a inspeccionar la zona donde zozobra el buque.

“El daño ambiental que pudiera causar el derramamiento de petróleo en esta importante zona acuática, sería más que una catástrofe. No podemos permitir que por descuido, irresponsabilidad y la falta de conciencia ambiental del régimen de Nicolás Maduro se acabe con la pesca”, dijo el sábado el diputado opositor Robert Alcalá en la red social Twitter.

Alcalá pidió a Pdvsa responder de inmediato luego de subrayar que en esa zona se origina la productividad primaria de todas las especies acuáticas del océano Atlántico. Y agregó que es allí donde se registra la pesca más productiva, para pobladores cercanos y países vecinos.

Pdvsa emitió un comunicado el 5 de septiembre en el que aseguró que el Nabarima posee todas las condiciones operativas y de seguridad y no constituye en forma alguna amenaza al ecosistema de la zona.

En esa ocasión la estatal petrolera acusó a políticos y empresas comunicacionales de unirse para perjudicar la industria petrolera nacional. “Además de utilizar el temor a un posible daño ecológico para justificar el criminal bloqueo y sanciones de los Estados Unidos contra Venezuela”, dijo.

Fuente: El Nacional