El producto bruto interno (PBI) de Perú cerraría el presente año con una caída de 13% debido al fuerte impacto económico de la pandemia del COVID-19 y el confinamiento social obligatorio decretado por el Gobierno, según el Instituto Peruano de Economía (IPE).
Para el próximo año, la organización estima que la economía peruana anote un rebote de 10,6% en caso siga por la senda de recuperación. Las proyecciones dadas por el IPE están basadas en un escenario sin un rebrote significativo de contagios de coronavirus, que desemboquen nuevas medidas de restricción. Toma en cuenta también un contexto de preservación de la estabilidad macroeconómica y financiera del país.

“Propuestas sin sustento técnico por parte de algunos actores políticos podrían poner en riesgo la estabilidad macro del país, cuya consolidación ha requerido años de disciplina fiscal y monetaria”, advirtió la institución.

Para el IPE, el proceso de reactivación económica por fases tuvo algunas falencias al inicio de su implementación debido a las demoras en la aprobación de protocolos de bioseguridad. Sin embargo, la flexibilización de las medidas para las empresas permitió que la caída de la economía sea más leve con el pasar de los meses.

“El menor retroceso de nuestra economía en los últimos meses demuestra que el Perú se viene recuperando pese a que fue el país más afectado durante el inicio de la pandemia”, apuntó.

El programa de garantías Reactiva Perú también tuvo un impacto positivo en la recuperación económica, según la institución, debido a que las empresas pudieron cumplir con sus obligaciones de corto plazo con sus trabajadores y proveedores.

“En total, las colocaciones de Reactiva Perú representan el 7,5% del PBI nacional, mientras que programas de créditos con respaldo del gobierno de países como Brasil, Chile y Colombia, oscilan entre el 0,8% y 4,2% del PBI”, puntualizó.

Fuente: El Comercio