La Central hidroeléctrica paraguayo/brasileña Itaipú “una vez más muestra su importancia vital para atender de forma robusta y rápida el sistema eléctrico de los dos países” propietarios, declaró esta semana su director general brasileño, general Joaquin Silva e Luna.
Aquello fue mencionado por Silva e Luna luego de que la usina, inclusive contra su programación, contribuyera a enfrentar los picos de consumo eléctrico que se produjeron en su país en el actual mes.

La reiteración del director brasileño tiene singular relevancia en este momento, porque con inusitada frecuencia los partidarios de la inmutabilidad del statu quo en la entidad binacional, vista la inminencia del vencimiento del plazo de 50 años que establece el Tratado para la revisión de su Anexo C, con una llamativa tozudez, insisten en que la gran central perdió relevancia en el sistema eléctrico de la vecina nación.

“Itaipú alcanza los 60 millones de MWh producidos en 2020, en el mes en que la planta está siendo fundamental para ayudar al sistema eléctrico nacional, cuando se presenta una demanda inesperada en horas pico debido a las altas temperaturas registradas en el pais”, añade el informativo oficial.

Agrega que en esos días, viernes 2 y martes 6 del corriente mes, "la central aumentó su generación más allá de lo programado para atender el alto consumo de energía eléctrica en temporada baja.

Según el material informativo, los días 2 y 6 “durante el pico de carga del SIN, por la tarde, se produjo un aumento inesperado de la demanda” y que la central, “en pocos minutos incrementó su producción más allá de lo programado” con el fin de atender el extraordinario brinco del consumo eléctrico brasileño.

Especifican que el martes 6 Itaipú incrementó su generación "en unos 1000 MW durante dos horas, alcanzando un valor máximo de 1200 MW. “Las oficinas brasileñas de la binacional apuntan que esa cantidad” se acerca a la producción total de la central nuclear Angra 2 (1350 MW) o a la central de Furnas de Rio Grande (1216 MW).

Sobre la producción acumulada en estos nueve primeros meses del año 2020, la entidad expresa que es “inusual tanto por la pandemia del covid-19 como por la hidrología”, con un estiaje récord del río Paraná, que “es 3,4% menor a la bajante registrada en el mismo periodo de 2019”.

Fuente: ABC