Si restringimos nuestro análisis a la mitad de la producción de la central hidroeléctrica, la que según el Art. XIII del Tratado de Itaipú pertenece a nuestro país, concluiremos que nuestro nivel de aprovechamiento no traspuso el techo del 16% y que “cedimos” al Brasil el 84%.
La primera conclusión, entonces, una verdad de perogrullo sin dudas, es el irrefutable subaprovechamiento paraguayo de la gran central hidroeléctrica binacional (222.957 GWh (1 GWh = 1000 MWh), de una generación acumulada de 2.745.576 GWh entre el 5 de mayo de 1984 y el 30 de setiembre pasado.
“Cedimos” el 84%
La segunda conclusión, reiterada hasta el hartazgo, pero sin que por eso haya perdido un ápice de su contenido reinvidicatorio, se relaciona con el portentoso caudal de energía eléctrica que nuestro país cedió a su socio “en igualdad de derechos y obligaciones” en tan extenso período: 1.149.854 GWh (84%) de su energía en Itaipú.
El 16% faltante, por ende, 222.957 GWh, fue lo que pudo y en muchas circunstancias lo quiso, emplear, en su territorio, de su propia energía.
¿Cuánto y por qué?
El tercer punto relacionado con las dos premisas precedentes se relaciona con el valor de la "compensación que abona Brasil al Estado paraguayo por cada MWh del que se aprovechó bajo la muy amigable palabra “cesión”.
El método válido para lograr un indicador útil es dividir la suma que pagó Brasil en todo ese tiempo en concepto de compensación por el total de MWh cedidos al sistema del vecino país.
El Ing. Juan José Encina, expresidente de la Unión de Ingenieros de la ANDE (UIA), docente de la Facultad de Ingeniería de la Una (Fiuna) en un meticuloso trabajo que preparó sobre los 47 años de Itaipú, recordado el 26 de abril último, cuyas sistematizaciones sirven de referencia a este material, destaca que entre 5 de mayo de 1985 y 31 de marzo de este año, la “tarifa equivalente” que recibió el Paraguay fue de apenas US$ 3,87/MWh.
En rigor, la energía paraguaya en Itaipú le cuesta al sistema brasileño US$ 3,87 sobre el costo promedio de generación, que según la Memoria 2019 de la entidad binacional, en ese año fue de 42,37/MWh o sea 45,84/MWh.
No debe olvidarse que hasta el 2023, la deuda de Itaipú sigue siendo el factor preponderante en la ecuación de cálculo del costo de servicio de electricidad de Itaipú, el 62,9% según el presupuesto de la binacional correspondiente al ejercicio 2019.
¿Barata, cara? Los precios de la energía eléctrica en la región dependen principalmente de la coyuntura.
A mediados del presente año, pudo observarse que en los intercambios eléctricos entre Brasil y Argentina, la tarifa superaba los US$ 100 MWh. xxTampoco debe olvidarse que en Itaipú, la deuda de referencia es cuestionada. En efecto, la “deuda espuria” que se inicio en 1986, por ejemplo, pese a que su monto superaba los US$ 4.000 millones, nunca fue aclarada.
Por otra parte, la tarifa real de Itaipú, todos saben, es el producto de la combinación de la energía garantizada con la superior a la garantizada, que según la cantidad de agua que haya baja o sube.
Fuente: ABC