Una opción que ha sido muy utilizada en el mundo, ha sido el migrar los automóviles de gasolinas y diésel a gas natural lo cual es un camino seguro, económico y ecológico, que disminuye el grave problema de contaminación ambiental que sufrimos.
El área metropolitana de Monterrey, está catalogada como la ciudad con la mayor contaminación en el aire de toda América. Ante este gran problema este año 2020 entro en vigor en el estado la ley de movilidad sostenible y accesibilidad, con la cual esperamos que nos brinde paulatinamente un respiro, dando un plazo de cinco años para todas las flotas a migrar hacia alternativas como a los automóviles eléctricos, de hidrogeno y de gas natural.
Esto es relativamente nuevo en México, pero en América del sur, Europa y Asia, la alternativa del gas natural en los vehículos ya tiene muchos años y es una realidad con la que actualmente se desplazan millones de vehículos.
El gas natural en el transporte brinda casi el mismo rendimiento que las gasolinas y el diésel, teniendo pequeñas variables dependiendo del tipo de unidades. Funciona de forma muy similar a las gasolinas en la cámara de combustión de estos motores, así que el convertir un automóvil de gasolina a hibrido con gas natural es algo muy simple y económico. Cualquier automóvil puede ser convertido a gas natural con un costo aproximado de 25 a 35 mil pesos, obteniendo un retorno de inversión que puede ser muy rápido dependiendo de la cantidad de kilómetros que recorra el vehículo al año. Siendo el gas natural un 50 por ciento más económico que otros combustibles.
El uso del gas natural vehicular (GNV) se ha incrementado en todo el mundo ya que los vehículos generan hasta un 90 por ciento menos emisiones de CO2 por cada kilómetro recorrido.
Otro de sus principales beneficios es la seguridad que brinda, ante una eventual pérdida como es más liviano que el aire el gas natural se eleva y se disipa rápidamente. El GNV reduce el riesgo de incendio y explosión en caso de accidentes.
También existen marcas como Seat en España que tienen una gran apuesta a los automóviles de gas natural, fabricados directamente de sus líneas de producción con una capacidad 90 por ciento de Gas Natural y un 10 por ciento de gasolina.
El caso de los camiones que funcionan con diésel, se pueden convertir en dual fuel, pero se tienen antecedentes que esto puede generar fallas frecuentes, es más recomendable adquirir unidades nuevas que trabajen cien por ciento a base de gas natural y únicamente con el ahorro que se obtiene por la diferencia en el precio por litro se puede renovar la flota entera. Existen en el país marcas que venden unidades de gas natural al mismo precio o hasta más baratas que las unidades de diésel.
Otro de los beneficios que ofrece el tener una diversidad de combustibles vehiculares en el mercado es que se contribuye a evitar que se detengan las actividades por falta de suministro.
Para el crecimiento del GNV es necesario contar con una red de estaciones que suministren GNV, algunas pueden ser multimodales (Gasolinas, Diésel, Gas Natural y Energía Eléctrica), otras dedicadas y algunas más de autoconsumo.
En Estados Unidos, Alemania, India, Argentina, Australia la mayoría de las flotas de autobuses utilizan gas natural.
En camino a la transformación con un rumbo ecológico cuatro fabricantes de vehículos han realizado importantes anuncios, Ford Motor Co. construirá una planta para fabricar una versión eléctrica de la camioneta F-150, General Motors (GM) desarrollará tres motores eléctricos para acelerar la construcción de una línea completa de vehículos eléctricos con rangos de 643 km. Volkswagen planea producir 1.5 millones de vehículos eléctricos anuales para el 2025 y Tesla ha dicho que reducirá los costos de la batería a la mitad y ofrecería un vehículo eléctrico de 25 mil dólares.
Estimado lector, ¿podremos romper paradigmas y tendremos las capacidades para reinventarnos ágilmente adaptándonos ante esta revolución tecnológica?. Gracias, ¡Hasta la próxima!
Luis González Villarreal - CEO de Petroland, ex Director General de Franquicias Pemex y constructor de Estaciones de Servicio. También es Comercializador Autorizado de la CRE; Especialista en GNL / GNC, miembro del PEI/NACS y Consultor en Eficiencia Energética.
Fuente: El Financiero