Al celebrarse 60 años de la fundación del organismo internacional, el experto en petróleo aseguró que la crisis sanitaria global “dejará cicatrices o huellas indelebles en la economía mundial”, por lo que la OPEP y sus aliados (OPEP+) “deben evitar, a toda costa, convertirse en una de las víctimas geopolíticas del coronavirus”.
Igualmente, indicó que la organización “llegó para quedarse e influir más decisivamente en el mercado petrolero mundial”, añadió que la suma de 10 países más produce una vital repotenciación para actuar en el panorama mundial. xxEl especialista aseveró que si la pandemia generó la caída de los precios del petróleo por debajo de los 30 dólares por barril, por primera vez desde su última recuperación en 2016, “no es menos verdad que los recortes llevados a cabo por la alianza OPEP+ (de 10 millones de barriles diarios) contribuyeron significativamente en la recuperación de los precios alrededor de los 40 dólares”.
A juicio de Quiroz las proyecciones para la demanda mundial de petróleo son inciertas, debido a que existe gran incertidumbre con respecto a la trayectoria futura de la pandemia, y no se puede descartar un resurgimiento de la propagación del covid-19 alrededor del mundo.
Finalizó su ponencia sugiriendo en esta época la OPEP y sus aliados deben jugar un papel fundamental avocados a la atracción de una cooperación global en términos de hidrocarburos, “y así contribuir a que la globalización sea más resistente frente a las amenazas futuras, y los mercados petroleros puedan brindar una idea del futuro postpandémico”, culminó.
Fuente: El Universal