El país cuenta, actualmente, con un sistema de GNV de tercera generación, cuando el de quinta no daña el motor del vehículo, mantiene la fuerza del motorizado y gasta menos combustible, informó el representante para Bolivia de B&H Argentina, Fernando Rupp.
Estas ventajas son posibles debido a que este sistema funciona con un software, que permite programar para que el vehículo funcione de la misma forma en que lo hace cuando se usa gasolina. Eso sí, sólo funciona con los vehículos a inyección.
El representante legal de Trans Sacaba, Juan Carlos Rojas, indicó que su institución tiene dos talleres de conversión a GNV, en los que se realizará la instalación del nuevo sistema.
FUENTE: LOS TIEMPOS
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