La declaración fue hecha en una entrevista con el diario Valor Econômico publicada este lunes (14 de septiembre de 2020).
“Es nuestro gran proyecto binacional. Brasil necesita gas y necesitamos mercados e inversiones ”, dijo Scioli.
Según el embajador, el país vecino pretende formalizar una propuesta para la conformación de un “comité técnico de planificación bilateral” para avanzar en temas de integración energética con Brasil.
Con la nueva infraestructura, Argentina quiere impulsar el uso del gas Vaca Muerta, una de las mayores reservas de gas de esquisto del planeta, por parte de la industria brasileña.
Se estima que la obra aumentaría el envío de gas argentino a Brasil a 15 millones de metros cúbicos por día. Sin embargo, la capacidad total podría alcanzar los 30 millones de metros cúbicos por día, según Scioli.
EL PROYECTO
Según el embajador, el proyecto del gasoducto contempla la ampliación de la capacidad de transporte en los 1.430 km del sistema de gasoductos que atraviesa el vecino país.
Las inversiones se estiman en US $ 3.700 millones entre la provincia de Neuquén, donde se ubican los depósitos, y la frontera con Brasil en Uruguaiana (RS). Casa Rosada aún busca financiamiento para el proyecto.
El tramo Uruguaiana-Porto Alegre, de casi 600 kilómetros de longitud y con un presupuesto preliminar de US $ 1.200 millones, estaría a cargo de Brasil.
FALTA DE INFRAESTRUCTURA Y GAS REINYECTADO
La red de gasoductos en Brasil es pequeña. Tiene 9.400 kilómetros. Aquí hay menos infraestructura para transportar el insumo que en Argentina, que tiene 1/3 del territorio.
Además de tener poca infraestructura, Brasil fomenta la importación de gas natural licuado, ya que existe una gran oferta del producto en el mercado internacional. Y se satisface con la reutilización del gas extraído del presal como medio para incrementar la producción de petróleo. La reinyección del gas aumenta la presión en los campos de extracción, lo que facilita la salida del petróleo.
Los datos históricos disponibles muestran claramente en la siguiente infografía cómo el país ha estado desperdiciando esta fuente de energía durante más de una década. Se ha reinyectado el volumen casi integral de gas natural que sale de los pozos del presal.
Un informe difundido por el Ministerio de Minas y Energía muestra que los 56 millones de m³ de gas natural reinyectados por día corresponden al 45% de la producción nacional.
Otros datos muestran que, de 2006 a abril de 2020, Brasil habría dejado de gastar US $ 24 mil millones en importaciones de gas si pudiera ofrecer en el mercado nacional el producto que ya se extrae aquí.
PARA PETROBRAS, LA TUBERÍA NO ES NECESARIA
En junio, la directora de refinación y gas natural de Petrobras, Anelise Lara, defendió la reinyección de gas natural en los pozos exploratorios del presal. También afirmó que no hay falta de infraestructura para el flujo de gas.
FUENTE: POWER 360 - BRASIL