Así lo confirmó el ministro de Energía, René Ortiz, a este Diario. El Gobierno tiene en firme la concesión de Esmeraldas, con capacidad de refinación de 110 000 barriles diarios y estudia las propuestas para las otras dos refinerías, con capacidad de 45 000 y 20 000 barriles diarios de producción, respectivamente.
En cuanto al avance de la concesión de la administración de la Refinería de Esmeraldas, el ministro Ortiz explicó que será una licitación y que podrán participar empresas calificadas previamente que reúnan dos criterios: capacidad financiera y tecnológica. Solo así se podría conseguir a la mejor empresa. Y explicó que no se puede aceptar que las empresas interesadas solo dependan de los precios de los comodities, pues cuando estos están bajos, entonces dejan de pagar sus obligaciones básicas (proveedores, sueldos, inversión). Dijo que esto ha pasado ya con algunas empresas encargadas de producción petrolera, en el país.
La idea, explicó, en este contexto es que la empresa encargada entregue por anticipado por dicha concesión. El Gobierno busca que la inversión sea de entre $2000 y $2600 millones, que incluiría la construcción de un tren de alta conversión para poder producir productos limpios y de buena calidad. Al ser consultado sobre cuáles serían las empresas interesadas, dijo que se las ha conocido públicamente. En agosto de 2019 Siglocorp, una empresa estructuradora de proyectos, presentó al consorcio Energlobal Sistemas de Refinación como una de las interesadas .
El funcionario explicó que Petroecuador no lo puede hacer por falta de liquidez y porque quisiera que vuelva a repetirse el despilfarro que representó la repotenciación realizada en el anterior Gobierno, justamente por la empresa estatal. Comentó que el dueño seguirá siendo Petroecuador y habrá una veeduría que estará pendiente de la operación. La concesión duraría 25 años, al cabo de los cuales el Estado recuperaría el bien, tal como va a suceder en pocos años con el Oleoducto de Crudos Pesados (OCP).
Entre tanto, está en marcha un proyecto para concesionar La Libertad. El ministro dijo que su intención era cerrar dicha refinería; pero se ha hecho expreso el interés de los municipios en obtener la concesión.
Efectivamente, Víctor Valdivieso, alcalde de La Libertad, confirmó que tras conocer las pretensiones del Gobierno de cerrarla, los Gobiernos Autónomos peninsulares conformaron un consorcio a fin de buscar un socio inversionista que pudiera repotenciar esta infraestructura. Así, los municipios de Santa Elena, La Libertad y Ancón han establecido su intención de que la Refinería les sea entregada en concesión para repotenciarla y modernizarla, por 25 años. El consorcio conseguiría un socio estratégico y la meta sería invertir al menos $660 millones.
Las conversaciones avanzan e incluso han firmado una carta de confidencialidad entre el ministerio y los GAD para poder acceder a información de la Refinería y poder estructurar la propuesta para los potenciales inversores. En quince días tendrían dicha información. “
“La Libertad es patrimonio de los peninsulares y no queremos quedarnos indiferentes, sino hacer algo para no perderla”, dijo.
De la misma manera, Ortiz explicó que hay interés de varias empresas de realizar el mismo procedimiento con la Refinería de Shushufindi, ubicada en la región Amazónica. En esta, la idea es adicionar varias unidades de alta conversión, también por la vía de la concesión.
Fuente: El Universo - Venezuela