Por más de $12.000 millones, la Contraloría imputó responsabilidad fiscal en contra de dos directivos en su momento de BIOENERGY S.A., empresa filial de Ecopetrol actualmente en trámite de liquidación, y la firma TIPIEL S.A, que suscribió contratos con BIOENERGY para realizar actividades que previamente habían dado como recibidas a satisfacción a ISOLUX, empresa a la que inicialmente se le contrató la construcción de la planta de etanol situada en Puerto López (Meta).
Y es que según lo indicó la entidad, no es de recibo que se diga que no se ejecutó por parte de ISOLUX el 93,70% de la Ingeniería, y que por esta razón debió nuevamente contratarse el mismo objeto, cuando previamente la misma firma TIPIEL le había
dado su aval con la aprobación de BIOENERGY, por lo que no se debieron invertir recursos en una labor que ya había sido certificada como cumplida.

Por eso, la Contraloría imputó al gerente general de Bioenergy y a su suplente, así como a la empresa Tipiel, para que respondan por el detrimento patrimonial que causaron, al celebrar un contrato que ya habría estado casi terminado.

Fuente: Minuto 30 - Colombia