En contraste, en la primera mitad del año pasado el uso de esta capacidad, que en total asciende a 1.601 millones de barriles diarios, se ubicó en 36%, luego de que desde el 2014 comenzó a descender, en 6.7% en comparación con 2013.
Aunque la producción de crudo en los yacimientos nacionales aumentó 2.1% en comparación con la primera mitad del 2019, ubicándose en 1.725 millones de barriles diarios, de hecho se observó un descenso en el envío de crudo para su refinación en el sistema nacional, que de un año a otro cayó de 34.1% a 34% del crudo extraído de los yacimientos nacionales para ser utilizado en las refinerías del país.
Pero gracias a la caída en los precios, que en el mes de abril llegaron a negativos durante algunas horas, las exportaciones de petróleo descendieron también de un año a otro, ubicándose en 1.142 millones de barriles por día en el primer semestre del año, con lo que se destinó el 66% de la producción de crudo a las ventas externas.
Fuente: El Economista - México