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Mayo fue el peor mes para el sector energético en 20 años. La producción de petróleo fue un 2% por debajo de la producción mínima mensual de las últimas dos décadas, según un informe del Instituto Argentino de Energía “General Mosconi”. La producción de gas está sólo un 10% por encima de la producción mínima de los últimos 20 años.
“En mayo de 2020 la producción de petróleo se redujo en un 12,2% en comparación con el año anterior”, dice el informe. “La magnitud de la disminución se debe tanto al efecto limitador del aislamiento en la actividad como a la parálisis de la demanda y a los bajos precios de mayo”, observa la labor del Instituto Mosconi, cuyo especialista es Julián Rojo.
El descenso más pronunciado es el del petróleo convencional, que representa el 80% de la producción local y ha disminuido un 16,2%, con un descenso acumulado del 6%. El petróleo no convencional (Vaca Muerta) aumentó un 5,9% interanual.
La producción de gas disminuyó un 9,2% interanual. Sin embargo, en los últimos 12 meses es un 0,6% más alto que en el mismo período del año anterior.
Las ventas de combustible disminuyeron un 27% en comparación con el mismo mes de 2019. Las ventas de gasolina fueron peores, ya que el diesel se utilizó para la producción agrícola. El refinado de la nafta disminuyó un 43% interanual y un 123% en los 12 meses acumulados. La producción de gasóleo disminuyó un 14,6% interanual y un 8,1% en el primer trimestre de 2020.
La demanda de gas y electricidad también fue menor. “La demanda general de gas natural en abril de 2020 (últimos datos disponibles) se redujo en un 7,9% interanual”, dice el informe de Mosconi. En mayo, la demanda de electricidad se redujo en un 7,6% en comparación con mayo de 2019.
El año pasado, la demanda de electricidad se redujo en un 1% en comparación con los 12 meses anteriores.
“La completa parálisis de la demanda, con una ligera recuperación en mayo, muestra dos aspectos: A lo largo del año, la demanda correlacionada con la actividad industrial y el transporte (esencialmente privado) disminuyó, pero no la demanda residencial, debido principalmente a un uso más intensivo en los hogares y a factores climáticos. Hay signos de una ligera recuperación intermensual en la industria y el comercio”, señala el periódico.
El gas convencional representa casi el 57% de la producción total del país. Cayó un 10,6% en mayo, mientras que el “no convencional” (como Vaca Muerta) cayó un 7,2%. Sin embargo, al comparar los últimos 12 meses, esta desviación es un 12,3% más alta.
En el sector, observan que hay un “efecto de aislamiento” que afecta a Buenos Aires y a los suburbios. Pero también dudan de que haya una recuperación una vez que la situación de salud mejore. Todo indica que este año se perderá para el sector. El “Barril Criollo”, una medida para aumentar la producción, entró en vigor en junio, por lo que aún no está claro si ha tenido algún efecto.
Lo que está sucediendo en el sector de la energía es un reflejo del colapso industrial. El EMAE -un indicador de la actividad económica- cayó un 26,4% en abril en comparación con el mismo mes de 2019, y el retroceso de este año hasta ahora es del 11%.
Fuente: ADN - Argentina