Lo hizo en una resolución emitida el 26 de junio pasado.
De esta manera, el Directorio de Petroecuador, conformado por Marco Ávila, presidente del Directorio de EMCO; René Ortiz, ministro de Energía y Johanna Pesántez, delegada del presidente Moreno a dicho Directorio, cedió posiciones con respecto a esta operación pedida por el Ministerio de Finanzas el 11 de mayo pasado, y que está atada a un crédito con China por $1400 millones. El Directorio da luz verde a los cambios, luego de que conociera el decreto presidencial 1075 del 23 de junio de 2020 que reformó el 822 de noviembre de 2015 y que establecía las facultades del Directorio y las gerencias de las empresas públicas.
En la resolución de Directorio “de ejecución inmediata” -a la cual este Diario tuvo acceso- se autoriza “la actualización y adecuación de la Política de Comercio Internacional de Hidrocarburos y, demás normativa interna aplicable incluidas todas las acciones administrativas pertinentes, para que sean aprobadas en la siguiente sesión de Directorio”. Además se dispone al gerente general de Petroecuador, Pablo Flores, que elabore nuevamente los informes técnico, económico-financiero y jurídico respecto de la transacción a cargo de la empresa pública (venta de crudo a China).
Es que en semanas pasadas se conoció que la Gerencia de Comercio Internacional consideró no conveniente la operación comercial que el Ministerio le proponían con la empresa china Zhenwua, en la cual la empresa debe vender entre 50 millones y 70 millones de barriles con un diferencial de -$1,11. Esto, a Petroecuador no le parecía conveniente pues el promedio del diferencial de ventas spot era $1,03, por lo que la empresa veía que tendría una pérdida por cada barril de $2,14, es decir unos $119 millones de afectación. Vender crudo con pérdidas, no es parte de las políticas actuales de comercialización de crudo a nivel internacional.
La política de comercio dicta que la empresa debe cumplir al menos tres parámetros. El primero propender a la maximización de los ingresos por venta internacional de hidrocarburos. Además, comercializar a largo plazo (dos años) el petróleo y los derivados, preferentemente con compañías estatales y consumidores finales. Así también, mantener el control de los precios a través de ventas spot ocasionales (programadas) mediante concursos abiertos y que sean mínimo 10 % del saldo exportable anual. Esto permite ajustar los precios conforme al mercado.
Sin embargo, luego de la comunicación del viernes pasado, es inminente el cambio de política. Esta podría relacionarse con los nuevos parámetros establecido en el decreto 1075 y que indica que la empresa no debe tomar en cuenta solo el tema de rentabilidad y utilidad empresarial, sino regirse a un tema general del beneficio al país. De acuerdo con el Ministerio de Finanzas, si bien podría haber pérdidas en la operación comercial, se ganaría por el lado de los intereses, ya que el crédito con China, tiene una menor tasa que la del mercado internacional.
Fuente: El Universo - Ecuador