Petroperú, la empresa pública y estratégica en el mercado de combustibles, también sufrió con la paralización de buena parte de la economía por la Covid-19.
El impacto además de la caída de las ventas se harán sentir en el retraso de la puesta en marcha de la nueva refinería de Talara. Eduardo Guevara comenta además los desafíos y retos que plantea su administración.

¿Cómo afectó a la empresa, y en qué medida, la paralización de buena parte de la economía por la pandemia?

Todo se paró salvo algunos servicios esenciales y eso obviamente nos afectó, porque si antes vendíamos 100, pasamos a vender 30. Hemos reducido a un tercio de nuestras ventas durante estos meses complicados, sobre todo la quincena de marzo y todo abril.

A medida que se vino reactivando (la economía) en el mes de mayo, estamos viendo mejoras en cuanto a las ventas, y ya esta semana no digo que la normalidad es absoluta, pero estamos en mejores condiciones que las que estuvimos en abril.

Sin embargo, Petroperú por su mismo rol nunca se detuvo.

Nosotros como empresa que da un servicio esencial para todos aquellos que están en la línea de defensa en el Perú, era importante seguir abasteciendo con combustibles, por ejemplo, a las fuerzas armadas, la policía, ambulancias. Hemos tenido que continuar con operaciones en varias de nuestras plantas y con el personal mínimo.

¿Considera que el saldo del año podría ser positivo en términos financieros?

Esa es la meta que tenemos, esto (el coronavirus) nos ha golpeado, pero consideramos que a medida que vaya reactivándose la economía, el año debería ser positivo.

Impacto en Talara

¿Se va a retrasar el inicio de la operación de la nueva refinería de Talara?

Originalmente, Talara estaba prevista hacia finales del primer trimestre del próximo año, y así comenzar operaciones. Todo iba viento en popa, teníamos a todos los contratistas, aproximadamente 9 mil personas trabajando diariamente dentro de las instalaciones de la refinería, todo dentro del cronograma y avanzando.

Cuando se produce el estado de emergencia, todo se tuvo que parar, excepto trabajos de supervisión o trabajos menores, que no podían parar, pero con un número de personal muy reducido.

¿Saldría antes del 28 de julio del 2021?

Tenemos que ser realistas y ver cómo avanzamos bajo estas nuevas condiciones. Ojalá podamos llegar a esa fecha, pero yo creería que por lo menos la entrega y el inicio de toda la planta debería ser hacia el segundo semestre del próximo año. Quizás algunas instalaciones o unidades auxiliares que forman parte de la nueva refinería podrían estar antes.

Eso es un tema que estamos viendo muy de cerca, pero hay que ser muy cuidadosos porque este es un proyecto muy complejo y, si vamos a tratar de acelerar algunos tiempos, hay que buscar que esto sea técnicamente analizado. Lo importante es completar el proyecto, y en eso creo que estamos todos encaminados.

¿Cómo va el avance de Talara tanto en la parte de Técnicas Reunidas como de Cobra?

Hasta mayo, el avance integral estaba al 89,12% y de cada uno de los contratistas, en el caso de Técnicas Reunidas, las unidades de proceso están al 94,34% y las unidades auxiliares (a cargo de Cobra) están al 70,02%.

¿Cómo se va a estructurar el último tramo del financiamiento del PMRT?

Aún estamos analizando, pero por lo pronto ya tenemos una primera parte, un financiamiento de US$ 285 millones que se está gestionando a través de una institución del gobierno español, que se denomina FIEM (Fondo para la Internacionalización de la Empresa). Este es un financiamiento que debe pasar por la aprobación del gobierno español, que ya se ha obtenido, y ahora estamos en el proceso de instrumentalizar el financiamiento.

De ahí tenemos que ver el resto del financiamiento y definir el mecanismo, eso se está evaluando. Son unos 500 a 700 millones de dólares que faltarían.

Los directorios anteriores sostuvieron que el proyecto de Talara era autosostenible, ¿usted mantiene esa posición?

Sí. Esto aún se mantiene.

Lotes petroleros

¿Les interesa participar en los próximos contratos que están por expirar en el noroeste?

Nuestro objetivo en cuanto a exploración y explotación está centrado en los lotes 64 y 192. En uno ya estamos (lote 64) y en el 192 el Estado está trabajando la Consulta Previa para que podamos concluir ese proceso e ingresar con un socio. Respecto a los lotes que están por terminar, sí es un tema que lo estamos viendo de cerca.

Para nosotros los yacimientos de esos lotes, cuyos contratos están por terminar, son importantes para Talara y vamos a seguir haciendo seguimiento y conversar con Perupetro y el Ministerio de Energía y Minas, para evaluar qué alternativas hay para que Petroperú pueda participar.

En cualquier caso que entremos, sin duda la mejor fórmula es la que tenemos en el lote 64 y que queremos implementar en el lote 192. Tener un socio que pueda entrar con nosotros, y que sea este el operador principal, y nosotros acompañar en esa sociedad.

“El proyecto se paga con su operación”

Hay quienes insisten en que Petroperú ejerce posición monopólica en el mercado de combustibles para pagar proyectos como la refinería de Talara, ¿qué tiene que decir al respecto?

El Proyecto de Modernización de la Refinería de Talara (PMRT) es uno muy importante, que tiene su propia forma de financiamiento. Son recursos que hemos obtenido emitiendo bonos o financiamientos bancarios. Lo más importante es que la construcción de la refinería se pagará con su propia operación.

¿Sobre posibles sobreprecios de los combustibles, qué nos dice?

Por ese lado, que es donde surge la preocupación de la población, todo lo que está relacionado con nuevas inversiones no está afectando la forma como determinamos los precios. El costo y la recuperación para construir Talara no va a impactar y no está impactando hoy en los precios de los combustibles. En cuanto a las prácticas de Petroperú, queremos recalcar que actuamos como una compañía que respeta las normas de libre competencia.

Fuente: La República - Perú