Según fuentes cercanas a la agencia estadounidense, Teherán está determinada a mantener los envíos de buques petroleros bajo la unidad militar de la Guardia Revolucionaria de Irán, “que responde al líder supremo ayatolá Ali Khamenei”.
“‘Esta es una decisión estratégica a largo plazo tomada por el Estado para expandir su influencia’, dijo un operador iraní familiarizado con la política, comparándola con los cargamentos para Siria”, reseñó Reuters, agregando que la Guardia Revolucionaria, el Ministerio de Petróleo de Irán, Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y el Ministerio del Petróleo y de Información de Venezuela no han ofrecido comentarios hasta los momentos.
De acuerdo con la nota de prensa, tras décadas como importador neto de gasolina, Irán anunció la autosuficiencia el año pasado con la tercera fase de su nueva refinería Persian Gulf Star de 350.000 barriles por día (bpd) en el puerto de Bandar Abbas.
“El exceso de oferta de gasolina de Irán equivale a 15 a 20 cargas medianas cada mes. Irán exporta solo cinco cargas al mes a Asia y África. Por lo tanto, Venezuela es la única opción viable”, dijo una de las fuentes protegidas por Reuters.
Por su parte, varios expertos en el tema petrolero advierten que Venezuela podría recibir alrededor de 600.000 barriles de carburante iraní en dos a tres cargas por mes mientras supera su crisis productiva interna e Irán no normaliza su mercado interno y comercio exterior de combustibles, afectados por el coronavirus. Sin embargo, ven con escepticismo que los cargamentos tengan un envío regular cada 30 días debido a las operaciones logísticas y las tensiones internacionales que provocaría por las sanciones de EEUU.
Grecia se retira
Como consecuencia de los estatutos de norteamérica contra Pdvsa y sus comerciantes extranjeros, tres empresas navieras con sede en Grecia afirman que van a detener su comercio con Venezuela.
Conforme a lo que sentenció el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, el pasado 2 de junio se habían impuesto sanciones a cuatro navieras, de distintas nacionalidades, por transportar petróleo venezolano.
Dynacom Tankers Management, con sede en Atenas y que administra el petrolero Chios I, entre los barcos en la lista del Departamento del Tesoro, dijo a Reuters que está “comprometida a abstenerse de cualquier negocio futuro que involucre a Venezuela”.
Mientras tanto, NGM Energy SA, que gestiona otro buque en la lista de sancionados (el cisterna Voyager I), sostuvo el viernes que había implementado “una política estricta contra el servicio de buques que pretenden cargar carga de origen venezolano en el futuro, sin autorización expresa de Estados Unidos”.
“Las sanciones existentes han reducido drásticamente las exportaciones del país OPEP, pero el líder socialista se mantiene en el poder”, estableció la agencia.
Fuente: El Universal - Venezuela