Esto se explica fundamentalmente por ser meses de cosecha, en los que los productores demandan millones de litros de este combustible en maquinaria agrícola, tractores, camiones, etc.

En el mes de enero la venta de Gas Oil casi alcanzó los 65 millones de litros (64.766.496) mientras que en febrero se vendió un millón más, (65.917.742).

Sin embargo y a pesar del COVID 19, en el bimestre marzo-abril el combustible registró una venta promedio de 70 millones de litros mensuales, explicable –como se narraba antes- por las cosechas.  Casi cuatro millones más de litros que el bimestre enero-febrero.

GASOLINAS: ECUACIÓN INVERSA

Para el caso de las gasolinas la situación es inversa. En el mes de enero la Nafta Super 95 registró una venta de 69.312.005 millones de litros, con cinco millones menos vendidos en febrero (64.434.449).

Tomando el mes de marzo, cuando comienza la declaración de “emergencia sanitaria”, la venta de Nafta Super 95 bajó hasta los 51.915.320 millones de litros vendidos, con un desplome importante en el mes de abril, cuando se vendieron 40.643.467 millones.

Analizando las cifras de la Nafta Super 95, se despacharon casi 45 millones menos en el bimestre marzo – abril (en plena pandemia)  con respecto a enero y febrero.

Fuente: Surtidores - Uruguay