El martes 19 se conoció que 15 lotes petroleros se encontraban en estado de fuerza mayor, al igual que el Oleoducto Norperuano.
Así lo advirtió Pablo de la Flor, director ejecutivo de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE). “Es la peor crisis que ha vivido el sector hidrocarburos en su historia reciente”, indicó a este diario. Ya la producción nacional de petróleo tuvo una caída de poco más del 50%, cuando en febrero registró 61,2 mil barriles diarios y en mayo 30,3 mil barriles.
Él había señalado anteriormente que existía la posibilidad de que las empresas a cargo de estos lotes los devuelvan al Estado. “Básicamente la producción ha caído a la mitad, sumado a las contracciones del precio internacional (del petróleo), está teniendo unas consecuencias nefastas en la actividad y por eso está el riesgo de suspender las operaciones y devolver los fondos”, añade. Se trata de un “escenario extremo”, a palabras de De la Flor.
Como indica Aurelio Ochoa Alencastre, especialista en temas energéticos, “esto ocurre en todo el mundo”, en referencia al cese de operaciones y la fuerza mayor, coincidiendo que es a causa del precio de petróleo. “En una serie de campos (petrolero), su costo de producción fluctúa entre 20 dólares a 30 dólares. No pueden continuar trabajando, porque su costo de producción es superado por el costo del barril”, indica.
A ello se añade la situación sanitaria por la COVID-19, sostiene Ochoa, indicando que hay empresas petroleras que entre los motivos para suspender operaciones está el riesgo de contagio del virus. Ese fue el caso del Lote 8, ubicado en Loreto y a cargo de Pluspetrol.
Sin embargo, precisa que la declaración de fuerza mayor no implica que la empresa devuelva los lotes, sino que solo se suspenden los compromisos acordados con el Estado, pero “no es que van a abandonar los lotes”. Aun así, esta última pasa a ser decisión de la empresa que “lo puede hacer en cualquier momento”, refiere Ochoa Alencastre.
Evitar este escenario
Se debe “tratar de que no se devuelvan los lotes”, señala Gustavo Navarro, socio director en Perú de Gas Energy Latin America.
Frente a este escenario, De la Flor sostiene que se reprograme el pago de regalías por la producción petrolera. “En el Perú, las empresas (del rubro) están sujetas a un régimen de pago de regalías. Proponemos una suspensión o reprogramación de las regalías”, expresa y precisa que no se trata de una eliminación.
“Estos lotes resultan imposibles de trabajarse si no hay un régimen distinto a las regalías”, añade. En ello coincide Ochoa Alencastre, aunque aclara que se tiene que ver cada caso de manera individual.
La recaudación por regalías fue de 62,8 millones de dólares en enero, descendiendo drásticamente en 78,8% para abril, a solo 13,3 millones de dólares.
Asimismo, Navarro considera necesario “evitar que se paralice la actividad exploratoria en el Peru”. Explica que el país “tenía más contratos de exploración que de explotación”.
¿Petroperú podría encargarse de los lotes?
En el escenario extremo, las empresas a cargo de estos 15 lotes los devolverían a Perupetro. ¿Podría ser una oportunidad para que el Estado los tome? Ello sería posible a través de Petroperú. Sin embargo, los especialistas consultados sostienen que la estatal petrolera primero debe fortalecerse, además de enfocarse en los dos lotes que ya tiene, el 64 y el 192. “Tenemos que estimular la inversión privada”, señala Pablo de la Flor.
Por su lado, tanto Aurelio Ochoa como Gustavo Navarro consideran que primero Petroperú debe fortalecerse. La empresa petrolera cuenta con dos lotes, el 64 y el 192, teniendo como socios a Geopark en el primero, mientras que en el segundo hay un contrato de explotación de Frontera Energy, que en febrero se amplió por 6 meses.
Ochoa señala que podría darse otra prórroga para Frontera Energy en el Lote 192, debido a la actual coyuntura en el país por el coronavirus. Sin embargo, consideró que Petroperú debería adelantar la operación, con el fin de buscar un socio para hacerse cargo de la producción.
Este Lote, explica, llegó a producir hasta 24 mil barriles diarios, aunque actualmente su promedio ronda en los 10 mil. Navarro añade que el lote 64, si bien su producción aún no inicia, tiene reservas de petróleo por casi 55 millones de barriles.
Por ello, el socio director de Gas Energy expresa que con las inversiones en los dos lotes, a futuro “le caerá liquidez a Petroperú”, lo que le ayudará posteriormente para invertir sin un asociado en un lote.
Ochoa Alencastre considera que actualmente no es ideal que la estatal peruana se haga cargo de más lotes, añadiendo que “no tiene un departamento que se pueda hacer cargo” de las inversiones, por lo que, en el caso del Lote 192, ya había autorizado al Bank of Amerca Merril Lynch la búsqueda de un socio inversor.
Fuente: La República - Perú