Según el ministro de Energía y Recursos Naturales No Renovables, René Ortiz, la nueva refinería tendría una capacidad entre 150 000 y 300 000 barriles de petróleo por día, que produzca combustibles con Norma Euro 5, dependiendo del mercado. Con la nueva refinería se cubriría una parte de la demanda de combustibles que actualmente son importados para abastecer el mercado local.

Existen seis firmas interesadas pero habría otras más. Ortiz, quien está en el cargo desde hace dos días, dijo que le va a dar un impulso de rapidez porque se lo necesita con urgencia. Reemplaza a José Agusto Briones en el cargo.

Se prevé que la concesión para la operación y mantenimiento de la nueva refinería sea por un periodo de 20 años. En 5 años empezarían los procesos de preparación, diseño, construcción, operación.

"Esto está dirigido a la iniciativa privada internacional, a quienes saben manejar este negocio (...) y los inversionistas corren con todo el riesgo, ciento por ciento de toda la inversión es privada", agregó a periodistas.

El inversionista podrá comprar el crudo ecuatoriano con el compromiso de vender los combustibles que produzca al país a precios basados en el marcador del Golfo de México, explicó Ortiz.

Acerca de la ubicación, Ortiz mencionó que eso lo decidirá el inversionista. "Hay criterios para esto. Uno podría ser infraestructura disponible, infraestructura disponible, en los alrededores de Esmeraldas. Hay otro criterio, mercado, Guayaquil, cerca de Guayaquil", agregó.

Antes de ejecutar esa inversión, explicó el Ministerio de Energía y Recursos Naturales No Renovables, el Estado concederá las licencias ambientales y de operación.