TNS LATAM
Buenas y malas noticias para Ecuador. Como era previsto, el precio del petróleo se elevó a niveles históricos tras el ataque con drones del pasado sábado a Aramco, la petrolera más importante de Arabia Saudita.
El petróleo WTI (West Texas Intermediate), referencial para el crudo ecuatoriano, ascendió 14,7 %, su mayor avance porcentual diario desde diciembre de 2008. Más de $ 7 en un día.
Mientras que el Brent marcó su mayor alza porcentual intradía en más de tres décadas. Los futuros del crudo Brent ganaron previamente hasta 19,5 % a $ 71,95 por barril. El referencial internacional cerró más tarde con una subida de 14,6 %, a 69,02 dólares el barril, el mayor avance porcentual al menos desde 1988.
Los precios recortaron su escalada luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, autorizó el uso de reservas de emergencia del país norteamericano para garantizar suministros estables de petróleo en el mundo.
Arabia Saudita es el mayor exportador de petróleo del mundo y el ataque a las instalaciones de crudo del productor estatal saudí Aramco en Abqaiq y Khurais recortó la producción en 5,7 millones de barriles por día. La empresa no ha dado un plazo para la reanudación de la producción al completo.
¿Qué efectos tendrá el incremento del petróleo en Ecuador? En términos generales, el aumento del precio del petróleo es positivo en dos aspectos, según analistas consultados por EXPRESO.
El primero porque significaría mayores ingresos de dinero para las cuentas fiscales; y el segundo una reducción en el riesgo país, que, en el caso de Ecuador, está correlacionado con el precio del petróleo.
No obstante, un petróleo más caro también plantea algunas interrogantes sobre las metas trazadas en el acuerdo entre Ecuador y el FMI.
Uno de los objetivos del plan con el Fondo es reducir gradualmente el gasto en subsidios a los combustibles. El incremento del precio del petróleo también significa un gasto mayor en importación de derivados de petróleo para el fisco.
Para este año, la meta en el marco del acuerdo con el Fondo es gastar en subsidios a los combustibles un equivalente al 1,8 % del Producto Interno Bruto (PIB), unos 2.000 millones de dólares. El año pasado se gastó un equivalente al 3,5 % del PIB, unos 3.800 millones de dólares.
Es decir, se busca reducir el gasto en, aproximadamente, 1.800 millones de dólares.
Para el exministro de Finanzas Fausto Ortiz, el impacto del incremento del costo del petróleo dependerá de cuánto tiempo dure al alza. En caso de que llegue a $ 65, por ejemplo, no tendría un gran impacto. Los mayores ingresos se diluirían por los subsidios, dice Ortiz.
Vicente Albornoz, decano de la Facultad de Economía de la Universidad de las Américas (UDLA), asegura que el incremento del precio del petróleo es positivo para el país, pero en el corto plazo. Un mayor precio mejora los ingresos fiscales. Pero para el largo plazo plantea interrogantes, dice Albornoz, sobre la dependencia de la economía ecuatoriana a la producción de esta materia prima.