Tucumán tiene 156 empresas exportadoras que mueven $us 1.036.019.867. Es el primer productor de azúcar de Argentina.
FUENTE: MONEY

Nuestra cita está pactada para las 20:00 del miércoles, pero por su agenda apretada se pospone para las 21:05. Se trata de Catalina Lonac, miembro del Directorio del Instituto de Desarrollo Productivo de Tucumán (IDEP), presidente de la Universidad San Pablo-T y vicepresidente de Usina Los Balcanes S.A.

Es una mujer que resalta de lejos. Sus radiantes ojos y su figura impecable denotan su liderazgo empresarial y su amor por la agroindustria. Las importaciones de Bolivia de productos argentinos se incrementaron en el último año en un 31,87%, crecimiento que sigue en línea con el presentado durante el periodo comprendido entre 2015 y 2017, donde incrementó un 1,31%. Un actor importante en la alianza comercial entre Bolivia y Argentina es el Instituto de Desarrollo Productivo de Tucumán. Lonac que también es empresaria azucarera sugiere a Bolivia subirse al carro del desarrollo y apurar la biotecnología para hacer frente a los cambios. En Bolivia estamos comenzando la era de los biocombustibles.

¿Cómo está Argentina en este momento? Argentina está en un camino de ida muy bueno con relación al tema del etanol, estamos mezclando nuestras naftas al 12%, es un plan firme que viene de hace mucho tiempo. Estamos trabajando para poder mezclar al 15% y posteriormente llegar a los motores flex (vehículos de dos combustibles).

Estamos hablando del cambio de la matriz energética real de un país, para eso trabajamos. El petróleo es poco y caro, en algún momento se va a terminar, pero más allá de esta cuestión lo que debe preverse por parte de un país es una energía limpia. Mire usted, por un lado tenemos el precio del etanol y nafta y por el otro lado lo que hay que ver es el etanol como una energía renovable y limpia. Tengo entendido que en su país tienen diferentes tipos de alcoholes… En Argentina tenemos alcohol de maíz y de caña. Proveemos en un 50% a las petroleras para poder hacer los cortes. Estamos trabajando también en un plan de caña transgénica y que ha sido liberada en Estados Unidos y en Brasil. Ahora esperamos que el Gobierno argentino también la libere.

¿Significa que Argentina está a un paso de caña transgénica? Tenemos muchas zonas sobretodo en el norte argentino y el NEA que hoy están secas, no sirven, no hay ninguna plantación.

Con una caña transgénica se pueden utilizar todas esas zonas para hacer más destilerías y alcohol y realmente cubrir los planes de llegar a los motores flex. Este es el camino para el cambio de la matriz energética. Pero su país tiene a Vaca Muerta con uno de los mayores potenciales de gas y petróleo en el Continente. ¿Qué debe hacerse? Si es cierto, Argentina tiene el plan de Vaca Muerta en el sur del país donde podría extraerse una cantidad importante de petróleo, pero insisto lo importante es hablar de energías limpias que es a lo que va el mundo.

¿Y la relación con Bolivia? Con respecto a nuestra relación con Bolivia, nosotros a nivel particular, hace tiempo venimos conversando con gente de Bolivia, cañeros, agroindustriales, CAO, estamos haciendo transferencia de tecnología. La verdad vemos con buenos ojos la política gubernamental de Bolivia porque ya empezó a hablar de biotecnología.

Es muy importante, pero necesitamos con urgencia la caña transgénica. Si hablamos de alimentos, tenemos que preocuparnos de la biotecnología. Sería muy buena que toda la alimentación del mundo sea orgánica pero es muy caro, entonces tenemos que ser responsables y los gobiernos deben dictar políticas para favorecer a sus habitantes. ¿Hay alguna alianza estratégica con alguna industria en particular? Nosotros tenemos una alianza estratégica con la CAO, Unagro y Guabirá. Además tenemos convenios con la universidad de San Pablo de Tucumán, donde tenemos un Centro Integral de Biotecnología Aplicada, en la que los ingenios de Bolivia se han interesado muchísimo. El 2017 recibimos la visita de los ingenios bolivianos. Estamos dispuestos a ayudar a Bolivia en todo lo que necesiten.

¿Qué tipo de transferencia tecnológica? Fundamentalmente de biotecnología. Por ahora hemos hablado con esos ingenios, pero esto tiene que pasar el Gobierno boliviano para avanzar con la biotecnología. Usted viene de una de las industrias más prósperas en cuanto a caña de azúcar y alcohol. ¿Realmente, recomienda la expansión de estos cultivos transgénicos y el uso de etanol en Bolivia? Si por supuesto. Hay que incentivar el uso de cualquier energía que sea limpia, renovable. El Mundo está en eso. Pero, ¿no es peligroso? No, para nada. Una política tomada con responsabilidad no puede hacer daño. Además esto traería mucha riqueza al país, sería autosustentable, pero debe haber funcionarios responsables.